Alejandro Álvarez Tomás, el vallisoletano de 36 años que falleció víctima de un paro cardiaco mientras participaba en la Media Maratón celebrada el sábado en Gijón, era un corredor "aficionado". "Había participado en varias pruebas pero nunca había corrido tanto como en una media maratón", relató ayer la hermana del corredor, Begoña Álvarez.

Los familiares y amigos del fallecido -marmolista de profesión, soltero y sin hijos-, le despedirán en un funeral que se celebrará hoy en el cementerio del Carmen de Valladolid. El cuerpo sin vida de Álvarez fue trasladado ayer a primera hora de la tarde a la capital castellana, poco después de que la autopsia confirmara que el corredor había fallecido como consecuencia de un paro cardiaco para el que sus familiares no encuentran explicación. "Nunca había tenido problemas médicos de ningún tipo", afirmó Begoña Álvarez.

El corredor había participado el pasado mes en otra carrera popular en Medina del Campo, pero en aquella ocasión sólo había corrido cinco kilómetros. "Estamos destrozados, esto es algo que no esperas. Sabíamos que iba de excursión el fin de semana pero no nos esperábamos que acabara así", aseguró la hermana en el tanatorio vallisoletano de Las Contiendas. La familia viajó a Gijón en la madrugada del domingo, pocas horas después del fallecimiento.

El suceso tuvo lugar a las ocho y media de la tarde cuando el corredor estaba a punto de alcanzar el kilómetro 18 de la prueba. Álvarez había acudido a la ciudad en un viaje organizado por el club Atletas Populares de Valladolid. Una entidad a la que, sin embargo, no pertenecía. El deportista participó en la prueba, de hecho, con el dorsal de un corredor que finalmente no compitió y le cedió su puesto. "Para poder costear el traslado a pruebas fuera de nuestra ciudad aceptamos que se apunte gente de fuera del club al autobús", aseguró Pablo Posadas, presidente del club Atletas Populares.

El Ayuntamiento de Gijón envió un comunicado expresando el pésame a los familiares del fallecido. Como respuesta a la confusión inicial que se vivió al comprobar que el fallecido corría con el dorsal de otra persona el concejal de Deportes, Jesús Martínez Salvador, aseguró que la organización de la prueba "comprueba siempre los datos de los deportistas al recoger el dorsal pero no durante la carrera, eso sería imposible".

Hospitalizado

La primera en atender al deportista fue una médico que estaba disputando la prueba, sin que sus intentos por reanimar al vallisoletano tuvieran éxito. A esa misma hora los sanitarios atendieron además a un asturiano de 53 años que cayó desplomado a 50 metros de la meta y que actualmente se recupera en la unidad coronaria del hospital de Cabueñes, en donde le fue diagnosticada una fibrilación ventricular. Los facultativos han conseguido estabilizar al paciente.