El autobús del Manchester United fue apedreado anoche a su llegada al estadio Upton Park, al este de Londres, lo que obligó al árbitro a retrasar 45 minutos el inicio del partido frente al West Ham. La aglomeración de gente en las inmediaciones del coliseo hammer y el lanzamiento de objetos al autobús del United hicieron que el equipo entrenado por Louis van Gaal no pudiera llegar al estadio 35 minutos antes del pitido inicial. Las piedras y las botellas de vidrio llegaron a romper varios de los cristales tintados del autobús del conjunto visitante, que pidió formalmente retrasar el comienzo del encuentro