Un Liceo-Barcelona siempre es uno de los platos fuertes de la temporada de la OK Liga, el típico partido marcado en rojo en el calendario tanto para los propios equipos como para la afición. Pero en la 2015-16 llega con el pescado prácticamente vendido. Porque el conjunto culé es desde la pasada jornada campeón del campeonato regular y lo único que queda en juego para los verdiblancos en los últimos tres encuentros ligueros -Barcelona, Vendrell y Vic- es la segunda posición, en la que empata a 59 puntos con el Vic. Para mantenerse en esta pelea, el conjunto dirigido por Carlos Gil echa el resto. El técnico argentino recupera a Toni Pérez y Josep Lamas, por lo que la única baja será la de David Torres. Nuevas fuerzas

Y es que está siendo un final de temporada atípico para el Liceo, desde hace ya varias jornadas sin nada a lo que agarrarse y con una plaga de lesiones que le complicaron todavía más las cosas. Josep Lamas sufrió problemas en la espalda que le tuvieron apartado de las pistas desde el derbi coruñés contra el Cerceda. Es decir, se perdió los últimos siete partidos, con un balance de cuatro victorias, dos derrotas y un empate en su ausencia. Toni Pérez, por su parte, ya llevaba alejado de la competición por sus molestias en la cadera ocho jornadas (cinco triunfos, dos derrotas y un empate para el conjunto verdiblanco sin él), aunque también se perdió tres encuentros por una fractura de la nariz.

Con los dos delanteros fuera, se completó la desgracia con la lesión de Pau Bargalló durante la Copa Latina que disputó con la selección española. El hermano pequeño de Jordi se perdió cuatro partidos (tres victorias y un empate en su ausencia). Volvió para el partido contra el Noia, que el Liceo solventó con triunfo, aunque nada pudo hacer en la derrota de la última jornada frente al Igualada. Para ese encuentro, pese a su vuelta, los verdiblancos tuvieron de nuevo tres bajas tras la operación a la que tuvo que ser sometido David Torres de una rotura de ligamentos. Una desgracia tras otra que obligó a varios jugadores liceístas a dar un paso al frente para no dejar al capitán Jordi Bargalló solo ante el peligro. Lo dio Oriol Vives y también César Carballeira así como David Torres antes de caer lesionado.

La enfermería del Barça también tiene un inquilino coruñés, un Eduard Lamas que va dando pasos en su recuperación y ya puede apoyar el pie en el suelo. El resto llega en plenitud de condiciones, pero tras la decepción de la eliminación en semifinales de la final a cuatro de la Liga Europea. El club afirmó sentirse muy perjudicado por los árbitros en el duelo que le enfrentó al Benfica, a la postre campeón de la máxima competición continental. Es el único asterisco de una temporada en la que levantaron la Copa del Rey, la OK Liga, la Supercopa de España y la Copa Continental. Europa fue el testigo de los últimos duelos entre el Liceo y el Barcelona, fue en la eliminatoria de cuartos de final, con un 6-0 en el Palau y un 2-2 en el Palacio. En la primera vuelta de la OK Liga, también hubo empate entre ellos (4-4).