El Madrid se anotó el tercer punto de la eliminatoria (1-2) al vencer por 91-74 al Barcelona, lo que le permite dar jaque a los azulgranas y al título, tras un partido en el que Sergio Llull y Rudy Fernández encabezaron a un equipo coral que superó en todo a un rival que no tuvo capacidad de reacción.

Una torcedura de tobillo de Carroll a los 2.30 minutos hizo saltar las alarmas en el Madrid, aunque el equipo no se descompuso y siguió apostando por una anotación alta.

Con el partido, el marcador y el rebote controlado, el conjunto que dirige Pablo Lasso gestionó el último cuarto con un importante colchón de puntos, lo que le hizo bajar un poco la concentración y que el Barcelona recortara, aunque muy lejos de rozar la remontada. Mañana, primer match-ball.