Lewis Hamilton (Mercedes) se alió con la lluvia que cayó durante la sesión de clasificación del Gran Premio de Austria para obtener la pole, lejos de su compañero y rival, el alemán Nico Rosberg, que saldrá séptimo por una sanción pese a obtener el segundo mejor tiempo. Peor le fue a los españoles: Alonso saldrá decimocuarto y Carlos Sainz, decimoquinto.

"Afortunadamente las condiciones han hecho que sea más fácil para mí. Con estas circunstancias depende de quien asuma más riesgos", aseguró un sonriente Hamilton que vio cómo su talento y las circunstancias de la jornada le ponían en la posición de privilegio. El inglés basó su éxito en el acelerado secado de la pista, sobre la que cayó la lluvia en la parte final de la segunda sesión y que fue perdiendo humedad de una forma rapidísima, lo que provocó que los tiempos de los monoplazas fueran mejorando segundo a segundo.

Por detrás quedó Hülkenberg. El Ferrari de Sebastian Vettel fue cuarto, pero también sufrirá una sanción, por lo que deja el tercer lugar de la parrilla a Jenson Button (McLaren).