El Básquet Coruña ya va tomando forma. Este año el objetivo del club es conservar al mayor número de jugadores posible. Y va por buen camino. El último en subirse al barco naranja ha sido Sergio Olmos. La entidad herculina ha trabajado duro para conseguir la renovación del pívot alicantino, que afrontará su segundo año de naranja a las órdenes de Tito Díaz.

Junto a Beqa Burjanadze, fue uno de los mejores jugadores del conjunto naranja. Su aportación en ataque sorprendió a los aficionados del Leyma, que vieron cómo se cargó el equipo a sus hombres durante el play off de ascenso a la ACB. Se llevó su único MVP del año en el último partido de la fase de ascenso, cuando el Básquet Coruña se despertó de su sueño con una derrota en Melilla. El punto positivo, el increíble estado de forma de Olmos. Fue el quinto jugador de la LEB Oro con mayor media de valoración en la liga regular y primero en los play off.

Su crecimiento continuará en el Palacio de los Deportes de Riazor. Se vestirá de naranja por segundo año consecutivo y volverá a compartir vestuario con Ángel Hernández, Zach Monaghan, Ben Stelzer y Gediminas Zyle. De momento, ese es el bloque disponible para el técnico Tito Díaz. Todavía es periodo de renovaciones, algo a lo que no estaba muy acostumbrado el Bárquet Coruña, que con su bajo presupuesto no podía hacer frente a ofertas por sus mejores jugadores. Esta vez la cosa ha cambiado. El buen año del equipo coruñés convence y los pupilos de Tito Díaz quieren seguir luchando por poner A Coruña en la ACB.

"El año pasado fue especial, ver crecer al equipo y cómo enganchamos a la afición me dejó muy buen sabor de boca y tengo muy claro que merece la pena seguir, veo en el club ambición y voluntad de seguir creciendo", confesó Sergio Olmos, dispuesto a seguir dándolo todo. "Tenemos las piezas para hacer algo igual o más bonito aún que el año anterior".