La doble campeona olímpica de salto con pértiga, Yelena Isinbáyeva, no se retirará mientras conserve una "mísera" posibilidad de acudir a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.

"Mi ánimo no es precisamente festivo. No puedo decir lo que he sufrido. Lo asumiré cuando lo entienda o alguien me diga: 'Yelena, no vas a ninguna parte'", dijo Isinbáyeva a la prensa antes de ser recibida por el presidente ruso, Vladímir Putin, en el Kremlin.