El francés Alexandre Geniez (FDJ), que logró en el Mirador de Ézaro su segundo triunfo parcial en una Vuelta a España, aseguró que ha "trabajado mucho para poder llegar bien", después de la caída que sufrió en el pasado Giro de Italia.

"La clave de esta victoria estuvo en que el pelotón no puso un ritmo de persecución hasta muy tarde y a los escapados nos permitió tener tiempo", comentó. En las duras rampas de ascensión al Mirador de Ézaro, con puntos concretos con un desnivel de hasta el 30 por ciento, aseguró que "lo único que oía eran gritos".

Sobre la subida destacó que por la cantidad de público asistente es "como un pequeño Alpe d'Huez", a la vez que apuntó que en el Tour de Francia no tienen "subidas de estas características".