"Ya no vamos a sorprender a nadie". Tito Díaz es claro, sabe que ahora su Básquet Coruña se convierte en el rival a batir de la LEB Oro, lo que le hace presagiar "una temporada difícil e igualada". Para eso necesita preparar bien a sus pupilos, que ya se ejercitan en doble sesión desde el miércoles.

Conservar a siete jugadores de la plantilla del año pasado le facilita las cosas a un técnico satisfecho con el rendimiento del recién llegado Tautvydas Sabonis. "Así aprovechamos el trabajo, avanzamos mucho más porque conocen bien el estilo de juego. Ayudarán a tirar del carro y que los demás se adapten", explica. También Javi Lucas se ha vuelto a vestir de naranja. Los últimos en llegar serán Dago Peña y Filip Djuran, que se incorporan el lunes. Este último será el sustituto de un Ben Stelzer que dijo 'no' a última hora. "Me trastocó un poco los planes pero Filip tiene sus características y es muy buen tirador".

Ya sobre la pintura, Tito Díaz no piensa cambiar su estilo de juego, solo quiere reforzarlo para "empezar y acabar bien" la temporada. "Buscamos un mejor comienzo porque terminar tan bien será difícil. Queremos equilibrio", confiesa el entrenador lucense, que avisa que no será fácil llegar tan lejos como el curso pasado, cuando el Leyma forzó el quinto partido de semifinales del play off de ascenso a la ACB ante el Melilla. "Lo hicimos muy bien el año pasado y ya no sorprendemos a nadie. El año siguiente a un año de éxito siempre es difícil pero confiamos en nuestros jugadores y vamos a intentarlo".

Para ello, necesita un pívot más en su plantilla y que el equipo llegue al inicio de liga, el 30 de septiembre, en perfectas condiciones. "Al ser tantos jugadores del año pasado ya no se necesitan tantos entrenamientos. Disputaremos siete u ocho amistosos durante el verano". La cuenta atrás ha comenzado.