Nairo Quintana (Movistar), nuevo líder de la Vuelta, se mostró "contento y moralmente reforzado" tras enfundarse el maillot rojo de líder en la cima de La Camperona y verse "por delante de los rivales".

"La sonrisa que llevaba en meta era solo puro sufrimiento. Lo hemos conseguido. Era este mi objetivo principal del día: ganar unos segundos a estos rivales", dijo. Quintana se refirió a la estrategia desplegada por el Movistar a la hora de la verdad, cuando empezaron las rampas más exigentes del puerto leonés.

"El tramo duro de La Camperona lo iniciamos con mucha precaución; estábamos esperando el ataque de Froome, que efectivamente llegó, y supimos responder a él. Llegué a la Vuelta con ganas, como en toda gran vuelta que disputo, y esto me dará un punto más de confianza. Da moral saber que estuve algo por encima de los rivales", comentó.

Sobre el momento de enfundarse la roja, el líder del Movistar señaló que "siempre es buen momento". "Nunca es pronto para tomar el maillot: es mejor estar delante con unos segundos que detrás, tratando de ganarlos. La carrera se está seleccionando de manera rápida, algo razonable teniendo en cuenta que llevamos una semana bastante rápida, con desgaste físico importante. En días como los de hoy- en alusión a ayer -se nota", explicó.

"De aquí en adelante", concluyó Quintana, "con el gran equipo que tenemos podré defenderme, empezando por mañana - hoy-, donde en buena lógica habrá que esperar y ver los acontecimientos".