Los estrenos están para probar y más cuando hay tantos cambios y al Liceo no le fue mal en su debut de la temporada ante el Porto en el Trofeo Teresa Herrera: empate a cuatro goles en un partido que dominó a placer en la primera parte y que se abrió en la segunda coincidiendo con más rotaciones en el bando local, con relevo incluso en la portería. El resultados es lo de menos y cuentan más las sensaciones. Las mejores las transmitió César Carballeira, que parece haber encontrado un sitio fijo. Pero también los nuevos dejaron su huella. Carlo di Benedetto marcó, Marc Coy jugó de titular y Henrique Magalhães y Joan Grasas disputaron minutos. Queda todavía camino por recorrer, pero el Liceo parece que no da pasos en falso. Nueva cara, pero misma esencia.Y hoy volverá a probarse contra el Valença (18.00 horas).

Para romper con meses de silencio en el Palacio de los Deportes de Riazor, Carlos Gil optó por una mezcla entre los veteranos y los nuevos, con Xavi Malián en la portería y Toni Pérez, Josep Lamas y César Carballeira acompañados por Marc Coy, que se estrenó con la camiseta liceísta como titular y demostró lo que ya se conocía de él: pelea constante en el área y disparo aterrador. Con este cinco, se adivinó un juego ofensivo, con tres delanteros natos y el canterano como jugador más retrasado. De hecho, el joven coruñés de 20 años tuvo un papel protagonista. Asumió la dirección del juego desde atrás, la recuperación, la defensa como último hombre e incluso se atrevió a atacar con la factura del primer gol. Algunas labores las heredó de Jordi Bargalló. El brazalete en cambió no lo lució ningún jugador, aunque previsiblemente será para Josep Lamas, que cumplirá su decimosexta temporada de verdiblanco.

El nueve en la espalda sí que fue para Carlo di Benedetto. Valiente de entrada el francés, que comparte generación con Carballeira pero al que se le notó más la inexperiencia y los nervios del estreno con algunas pérdidas a mitad de cancha. Lo arregló con recuperaciones, velocidad en las transiciones y también con otro gol al filo del descanso. Menos protagonismo, aunque no de minutos, tuvo Henrique Magalhães, más gris, aunque fue el primer cambio ideado por Carlos Gil en el primer tiempo. El técnico argentino también hizo una mezcla de nuevos y antiguos para la segunda unidad, con David Torres como único superviviente del pasado curso saliendo desde el banquillo, Carballeira todavía en pista y ambos acompañado por el portugués, el francés y más tarde por Joan Grasas. La presencia del veterano jugador sirvió para dar descanso a Carballeira, aunque también actuaron juntos al comienzo del segundo acto, para el que Gil también dio paso bajo palos a Álvaro Shehda.

Este se abrió con un gol de Josep Lamas en una contra muy bien llevada por Toni Pérez. El asturiano demostró que los problemas físicos de la temporada pasada ya están olvidados con buen rendimiento ofensivo y defensivo. El 3-0 dio paso a muchas rotaciones locales. Y el Porto subió la intensidad. Nunes en un minuto redujo la distancia al 3-2 con un disparo y en una contra la robarle la bola en la media pista a David Torres. La remontada la confirmaron Prieto y Rafa, pero el Liceo no se rindió y Toni Pérez empató en el segundo palo. En los últimos minutos, tanto Josep Lamas como Helder Nunes (este a ocho segundos para la bocina) fallaron sus faltas directas.