La inesperada puesta en escena del Cáceres puso en muchos aprietos a un Leyma Coruña que apunto estuvo de sumar la octava victoria del curso pero, en cambio, recibió un golpe cuando solo quedaba un minuto de partido (88-84). Se coloca así en la tercera posición de la tabla, aunque con el mismo balance que Breogán y Lleida, primero y segundo respectivamente.

El equipo de Antonio Bohigas salió a por todas. De ahí los 34 puntos que se agenció en el primer cuarto. Los triples fueron su trampolín. Le entraba todo. La defensa naranja, algo debilitada, no encontraba la fórmula para detener al Cáceres. También contestaron los coruñeses con lanzamientos desde la línea de 6.75 pero su referente, Dago Peña, no tuvo su mejor día. En su lugar apareció Zack Monaghan. Se vistió de líder y acumuló un 28 de valoración, fruto de 25 puntos, siete rebotes, cuatro asistencias y una falta recibida. Él guió al conjunto de Tito Díaz en ataque. Pero a nivel defensivo seguía habiendo carencias y eso ayudó a los extremeños a ponerse 18 arriba (50-32 ).

Una vez finalizó el descanso, el Leyma optó por dar los últimos coletazos en busca de una remontada épica. Podría haberse hundido pero este equipo nunca baja los brazos, como bien repite siempre su técnico, y ayer lo volvió a demostrar. Parcial de 2-12 para empezar, con Monaghan lanzado al ataque ayudado por Javi Lucas y Djuran. Al último cuarto, el equipo coruñés entró con un 0-13 que le ponía por delante en el marcador (68-73) y le permitía soñar con el liderato en solitario. El Cáceres, mucho más necesitado, buscó fuerzas donde no las tenía para devolver las tablas al marcador (81-81) y abrir un final de infarto. Rakocevic, el mejor de los locales, acercó a los suyos a la gloria. Los tiros libres serían decisivos. Pero Parejo no falló y el tiempo se esfumó.