Mejor inicio y mejor final. Es lo que le bastó al Leyma para superar al Breogán. Parece poco y fácil. Pero los naranjas hicieron un despliegue de intensidad ofensiva y acierto anotador, sobre todo en triples, con catorce y casi el 50%, a lo que se le unió su capacidad para tomar las mejores decisiones en los momentos más calientes, que pocos pueden lograr. No se gana al líder todos los días. Porque el conjunto lucense, pese a la derrota, se pone primero en la clasificación de la LEB Oro, con la cuarta posición para los coruñeses. Paso al frente de los de Tito Díaz después de las dudas de las últimas derrotas. No regresan porque nunca se han ido. La Copa Princesa sigue siendo un objetivo real.

Su decisión fue desde el segundo uno. Demostró que jugaba en casa con una salida arrolladora. Tenía dos puntos más de intensidad defensiva, lanzándose a por todos los balones, presionando a toda pista. El Breogán, sorprendido por este arranque, tardó en encontrar la forma de contrarrestar la amenaza de los naranjas, que corrían mucho de la mano de Ángel Hernández con contragolpes que culminaba un Dago Peña que sigue creciendo según pasan las jornadas. El 12-2 exigía una reacción visitante, sobre todo porque sus únicos dos puntos habían sido desde la línea de la personal. No les entraba una, obligados a tirar desde lejos por la defensa local. Mejoró con Salva Arco y la entrada de Fakuade, pero el conjunto de Tito Díaz estaba inspirado. Los triples de Lucas y Djuran cimentaron un primer cuarto de claro dominio herculino (28-19).

El segundo cuarto comenzó con la misma dinámica, con dos triples de Monaghan y Mikulic que abrieron brecha (34-19). Pero el Breogán no era ya el de los primeros minutos de juego. Ahora respondía a cada golpe. Como cuando Djuran volvió a anotar desde la línea de 6,75 metros. A la jugada siguiente los lucenses anotaron su primero triple. Parecieron encontrar la inspiración porque hasta el descanso, encestaron cuatro más. Era un partido indudablemente marcado por los exteriores, que imponían su ritmo atrevido y alegre a uno más pausado y dirigido a los interiores. Al descanso, los naranjas mandaban, pero el Breogán mostraba sus primeros síntomas de despertar (51-42).

El tercer cuarto fue el de los lucenses. Se acordaron de que jugaban con pívots y empezaron a buscarles. Sacaron cinco faltas al Leyma en apenas tres minutos (sin apenas aprovechar los tiros libres con un pobre acierto) y un parcial de 2-12 niveló la balanza (53-51). Vuelta a empezar. Tito Díaz pidió tiempo muerto para frenar esta inercia, pero con un triple de Juan Fernández el Breogán se puso por primera vez por arriba (53-54). Le respondió Mikulic, también con canasta de tres puntos. De hecho, los triples fueron el principal recurso local para mantener en el partido ante el vendaval que estaban siendo los de Lugo. Djuran, Mikulic y Javi Lucas salvaron el honor coruñés para llegar al inicio del último cuarto todavía por arriba (71-69).

El ritmo fue frenético en los primeros minutos del cuarto definitivo. En tres minutos el parcial era de 7-12 para el 78-81. Cada ataque era una canasta, entre ellos tres tiples del Breogán y dos de Dago Peña para el Leyma (81-84). Hasta ahí duró la inspiración lucense, que se atascó y chocó una y otra vez con la defensa naranja. Solo fue capaz de anotar un punto más hasta que acabó el partido. Los de Tito Díaz aprovecharon y poco a poco se fueron yendo en el marcador mientras sus rivales se desesperaban reclamando faltas en cada jugada. Otra vez, el Leyma tuvo más cabeza cuando fue necesario. Cualidad de campeón.