El Barcelona fue el peor parado de los cuatro equipos españoles presentes en el sorteo de los octavos de final de la Liga de Campeones al quedar emparejado con el potente Paris Saint-Germain, mientras que el Nápoles, el Bayer Leverkusen y el Leicester City serán los respectivos oponentes de Madrid, Atlético y Sevilla.

Salvo el conjunto azulgrana, los otros tres evitaron a los teóricos rivales más peligrosos con los que podrían quedar encuadrados en estos primeros cruces cuyos duelos de ida se disputarán entre el 14 y el 22 de febrero y los de vuelta, entre el 7 y el 15 de marzo.

Como suele ser tradición en los últimos años, al Barcelona, que tendrá a su favor la vuelta en casa, le tocó en liza un primer rival potente para el inicio de las rondas decisivos, aunque la estadística le favorece ampliamente frente a un PSG dirigido por Unay Emery y actualmente en horas bajas.

Bayern y el conjunto parisino eran los equipos a evitar, y finalmente fue el campeón francés el que se medirá a los de Luis Enrique Martínez, que ya en la campaña 2014-2015 se deshicieron de este rival en los cuartos de final tras ganarles por 1-3 en el Parc de los Príncipes y 2-0 en el Camp Nou en una campaña donde también estuvieron en la fase de grupos con un triunfo para cada uno (3-2 en Paris y 3-1 en Barcelona).

En la temporada 2012-13 también se vieron las caras en cuartos y también hubo pase culé tras sendos empates, 2-2 en la ida en Francia y 1-1 en la vuelta en la Ciudad Condal. Además, Emery sólo ha ganado en una ocasión en toda su carrera al Barcelona.

Por su parte, el actual campeón, el Madrid, logró evitar a los peligrosos Juventus y Arsenal en este primer cruce, donde le tocó el irregular Nápoles, teóricamente accesible para los de Zinedine Zidane.

El conjunto napolitano, actual cuarto clasificado de la Serie A, ha perdido potencial respecto a años anteriores tras la marcha de Gonzalo Higuaín a la Juventus. Los exmadridistas José Callejón y Raúl Albiol permanecen en la plantilla del carismático Maurizio Sarri.

El Nápoles, que ya fue eliminado por el equipo blanco en los octavos de final de la Copa de Europa de 1987-88 cuando militaba en sus filas Diego Armando Maradona, tiene como referente al eslovaco Marek Hamsik y la fortaleza que siempre suele mostrar en San Paolo, ya que lejos de su feudo baja un tanto su rendimiento.

Además, el Atlético, actual subcampeón, se volverá a topar con un viejo conocido como el Bayer Leverkusen alemán, con el que se cruzó hace dos campañas, con sufrido pase para el conjunto rojiblanco, y que volverá a contar con la vuelta ante su público.

Finalmente, el más agraciado en teoría fue el Sevilla, que quedó emparejado con el Leicester City, actual campeón de la Premier League y debutante en la máxima competición continental, donde ha rayado a buen nivel superando al experto Oporto en la fase de grupos.