La de Sergio Campos (A Coruña, 1996) no es la historia de una promesa de la natación que arrasaba desde edades tempranas. Es la de un deportista que ha ido cumpliendo etapas, sin saltarse ninguna ni agobiarse, aprendiendo lo que toca en cada momento para explotar en plena madurez personal y física. Hace tres años que se proclamó campeón de España júnior de la mano de Raúl Solleiro en el CN Coruña. Y desde entonces no ha dejado de crecer hasta lograr el subcampeonato absoluto el fin de semana pasado en Sabadell en la prueba de 50 metros, a solo una décima del oro. "Estoy muy contento con la medalla de plata. Siempre fastidia un poco quedarse tan cerca del oro, pero hice una buena carrera y tengo que quedarme con eso", dice el nadador, que ahora entrena en el CGTD de Pontevedra a las órdenes de Luisa Domínguez y Fernando Zarzosa. Muchos artífices en la evolución de un diamante de la piscina.

"Está acercándose a los buenos", dice sobre él Solleiro, presidente y entrenador del CN Coruña. "Solo le falta un último salto, como conseguir alguna mínima internacional", añade. Puede ser, de hecho, una de las metas de cara al verano. "El objetivo es seguir trabajando bien y bajar mis marcas. Si podemos, acercarnos a alguna mínima o más medallas, mejor. Pero solo con vistas a bajar mis marcas sin obcecarme con una mínima o medalla", asegura el nadador, de 20 años, que tiene claro que va por el buen camino: "Estoy muy contento con el Campeonato de España en general, por cómo salió, lo que significa que estamos trabajando bien y vamos por el buen camino, cosa que aún motiva más para seguir trabajando".

Y es que en Sabadell se quedó muy cerca del récord gallego y pulverizó algunas de las plusmarcas más antiguas del club. Solleiro habla de una "progresión continua" y analiza las claves de su buen rendimiento. "Cada vez es más maduro para aguantar más entrenamientos de calidad. Yo siempre le digo a los chicos que entrenar bien cuando se está bien es muy fácil, que lo difícil es hacerlo cuando se está mal. Y eso es lo que diferencia a los que están arriba de los que no", explica. "Sergio quizás antes no era capaz de esa continuidad, de encadenar muchos entrenamientos buenos a la semana. Ahora puede estar rondando el noventa por cien", añade.

Pero cuando se llega a cierto nivel, ganarle centésimas al reloj es cada vez más difícil. Cada una cuesta el doble de trabajo. Por eso hay que centrarse en pulir los detalles. En Sabadell, el coruñés demostró un gran capacidad técnica en sus salidas y virajes. "Nos centramos en trabajar bien y buscar en cualquier sitio nuevas mejoras, ya sea técnicamente como en el trabajo aeróbico", comenta Campos. "Es algo que entrenan mucho y que le dan mucha importancia", aporta Solleiro en relación al gran viraje que hizo su pupilo en el Campeonato de España, apurando el subacuático hasta la corchera de los 15 metros, el tope permitido. "Ahora tiene que conseguir trasladar estas grandes marcas que hizo en corta a la piscina larga", le pone como objetivo el entrenador del CN Coruña.

"Trabajo en mejorar la continuidad, en no tener altibajos durante la temporada, pero áun me queda mucho por mejorar", opina, por su parte, Sergio Campos, que igualmente se muestra confiado: "Cada vez que bajo una marca sé que estamos trabajando bien y me llena de confianza y de ganas de seguir trabajando para volver a bajarla". Motivos para estarlo tiene. "Ahora mismo creo que es el nadador gallego con más proyección", enfatiza Solleiro, orgulloso del que fue su pupilo y que sigue siendo la principal joya del club. Y no solo porque sea un gran nadador. "No se lo tienen nada creído y es un chico súper humilde, que se preocupa por todos sus compañeros, los pequeños y los mayores y por las necesidades del club", concluye. Un ejemplo para todos.