Una de una. La primera participación de la coruñesa Lydia Alonso en una fase final de la Copa de la Reina de voleibol concluyó de la mejor manera posible: alzando el trofeo de campeonas y con la medalla acreditativa colgada en su cuello. Para la joven jugadora de 19 años del Haris Fígaro Peluqueros fue una experiencia que recordará toda la vida. "Por ahora es el día más feliz desde que juego al voleibol", asegura la campeona.

Alonso empezó en el banquillo y su técnico David Martín le dio protagonismo en el tercer y cuarto parcial, por lo que la central nacida en A Coruña vivió un carrusel de emociones: "Yo estoy preparada para salir y darlo todo. Obviamente, siempre que sales a jugar y tienes nervios, pero nervios buenos por querer competir y aportar al equipo. Cuando el entrenador me dijo que tenía que salir mi objetivo era hacer lo que sé y ayudar a mis compañeras", manifestó ayer la jugadora del conjunto tinerfeño.

Derrotar al potente Naturhouse Ciudad de Logroño, ganador de las tres últimas Copas, no era una tarea nada fácil, pero tanto Lydia como sus compañeras no dieron nunca por perdido el encuentro pese a que las riojanas remontaron un 0-2 y luego se pusieron por delante en el quinto y definitivo parcial. "¿La verdad? No, nunca vi el partido perdido. Confío en mi equipo y en mis compañeras y sabía que estábamos preparadas. Estoy muy orgullosa de pertenecer a este equipo", afirma Alonso.

"Una final se vive con muchísima tensión y, sobre todo, los últimos puntos de ese partido porque los ves desde fuera y no desde dentro de la cancha. Lo que intentas es ayudar a tus compañeras, darles ánimos y apoyo en esos momentos", dice para luego reconocer que "es la primera vez que jugaba una Copa de la Reina y la gané. Así que sí, por ahora es el día más feliz de mi vida desde que juego al voleibol".

Sin embargo, no deja de reconocer que el rival era y es la referencia del voley en España. "Sabemos que Logroño es un equipo muy fuerte, pero cada partido es diferente al anterior y lo que hemos demostrado es que, haciendo las cosas muy bien, se les puede ganar", dijo la coruñesa. Y luego tuvo palabras de elogio para "nuestra afición, porque nos aporta mucha energía positiva y sin ellos no lograríamos lo que hemos conseguido hasta ahora. Una de las cosas más bonitas era mirar a la grada y ver las caras conocidas de la afición. No parecía Madrid sino Tenerife, con la grada de azul y blanco".

"Se la dedico a la afición porque no paran de animarnos en todos los partidos. Y sobre todo me quedo con mis compañeras porque vi cómo sufrimos, cómo luchamos por lograr la Copa. No pensé en nadie en especial, sino en todo el equipo", se sinceró.

Orgullosa del Haris Fígaro Peluqueros, Lydia Alonso se plantea nuevos objetivos a partir de ahora: "Yo sé que somos un equipo muy competitivo diga lo que diga el resultado y el rival. Somos un grupo que le pone las cosas difíciles al equipo contrario". "Vamos a intentar ganar la Superliga, vamos a trabajar para ello", señaló la jugadora coruñesa.

Finalmente, Alonso tuvo palabras para David Martín, presidente, técnico y el responsable de que la gallega vistiese los colores del Haris Fígaro Peluqueros después de un año en el Charleroi de la Liga Belga. "David es exigente, pero es un buen entrenador. Siempre está buscando errores para intentar corregirlos", sentenció.