El Madrid se exhibió con una goleada ante el Eibar en el campo de Ipurua. Los blancos, con varios cambios y muchos suplentes, dieron una imagen muy mejorada respecto al empate liguero del miércoles ante Las Palmas y lograron un refuerzo moral con vistas a su compromiso del martes contra el Nápoles en la Liga de Campeones.

El entrenador madridista, Zinedine Zidane, con las bajas de Cristiano Ronaldo, Bale y Álvaro Morata, alineó inicialmente a Lucas Vázquez y Marco Asensio como acompañantes de Karim Benzema en la delantera. Además, el técnico dio descanso a Toni Kroos (jugó James) y Marcelo (actuó Nacho).

Todos estos cambios dieron resultado, porque la primera parte, que acabó 0-3, sólo tuvo un color, el blanco, con un Madrid muy superior a un Eibar que jugó la peor primera mitad de la liga. Asensio y Peña cerrarían el marcador.