Ya huele a play off. Y el Leyma Coruña lo sabe. Por eso el partido ante el Melilla era tan importante. No solo para defender la sexta posición sino para coger carrerilla para la eliminatoria de cuartos de final frente al Palencia, contra el que ha perdido sus dos enfrentamientos previos esta temporada, y que empieza ya el próximo viernes. Sin tregua, como tampoco la dio en la batalla de ayer el Melilla. Y no solo por su indumentaria. Pero la victoria refrenda en su buen momento a los naranjas. Pasaron un bache que parece totalmente superado. Anoche les bastó apretar el acelerador en el último cuarto para despegarse de un rival incómodo. Los coruñeses, que parecieron sentenciar el duelo cuando y como quisieron. Sin estridencias. Con eficacia. Sin su mejor juego, pero con mil y un recursos. Y con un Sergio Olmos que fue el mejor y cuya recuperación como agente decisivo es la mejor de las noticias de cara al play off, por inteligencia y juego.

El partido como el Melilla era un anticipo de lo que se viene. Lo sabía el Leyma y también su afición, que acudió a la llamada. Todavía quedaba en el recuerdo la eliminación el año pasado en las semifinales de un play off que finalmente ganarían los de la ciudad autónoma, pero sin el premio del ascenso. Sin el nivel del año pasado, los visitantes eran un rival a tener en cuenta y una buena vara de medir. La igualdad se mantuvo durante casi todo el encuentro. Ninguno de los dos equipos conseguía abrir brecha en el marcador porque las rachas iban cambiando de uno a otro. Al término del primer cuarto, 16-13 a favor de los locales. Cuando finalizó el segundo acto, tampoco había nada decidido (37-33) y tampoco sirvió el tercero para deshacer el empate (51-52). Se decidió todo en el último, en el que el Leyma más se gustó pese a empezar por debajo en el marcador, una tendencia que frenó un triple de Javi Lucas. Brilló Sergio Olmos, con cinco puntos consecutivos, defensas y robos. Se le sumó Filip Djuran, con acciones bajo tableros. Y apareció Zach Monaghan. Con mucha facilidad los coruñeses metieron la directa hacia una victoria que vale el sexto puesto en la fase regular y el emparejamiento en cuartos ante el Palencia.