El hockey sobre patines es uno de esos deportes en los que en dos minutos puede pasar de todo. Una revolución. Se vio ayer en el partido por el bronce del Campeonato de España júnior que disputaron el Órdenes y el Compañía de María en Monte Alto. Dos equipos que se conocían a las perfección, que jugaban su noveno partido de la temporada y que jugaron bien sus cartas. Sobre todo los colegiales, que en un solo partido podían revertir toda una temporada en la que los verdiblancos habían sido superiores. En este partido solo lo fueron en los últimos diez minutos y después tuvieron la suerte y el acierto de tener más puntería en la tanda de penaltis para confirmar su tercera posición por detrás del Manlleu, campeón, y del Barcelona.
El Compañía de María, de hecho, dominó con mano de hierro durante 30 minutos. La primera parte terminó con 0-1 con gol del pichichi Javier Añón. Pero parecía poca distancia para lo visto en la pista y Raúl Fernández y de nuevo Javier Añón pusieron el 0-3. Los coruñeses lo tenían casi hecho. Pero los de Marcos Rey no tiraron la toalla y tuvieron una fe inquebrantable para iniciar una remontada en los diez minutos finales que comenzó con un tanto de Daniel del Río al que le siguieron otros de Pablo Parga y Álex Roca. Con el 3-3, quedaban dos minutos y se desató la locura. Marcó el Compañía a los pocos segundos del empate del Órdenes. Otra vez Javier Añón. Y los verdiblancos, en vez de venirse abajo, respondieron con otro gol de Pablo Parga e incluso, a segundos para el final, tuvieron en sus guantes la victoria.
El bronce se decidió en los penaltis. Marcos Rey se llevó a los suyos a una esquina de la pista, haciendo piña. En el banquillo del Compañía había muchos nervios. Pasara lo que pasara, ambos habían dado espectáculo. Pero la medalla solo podía ser para uno y fue para el Órdenes. Campeón de la fase regular, de la final a cuatro y del sector norte, culminó una temporada para el recuerdo.
El título se lo llevó el Manlleu por delante del Barcelona con los coruñeses Antonio Miguélez y Fran Otero. Se tomó la revancha de lo sucedido en la final del campeonato catalán y ganó por 3-2. Justo vencedor porque fue el mejor de todo el fin de semana en A Coruña.
Sin bronce infantil
El Compañía optaba ayer a dos bronces nacionales y al final se quedó sin ninguno porque los infantiles también cedieron en el partido por el tercer y cuarto puesto ante el Oviedo Booling (3-0). Mala suerte para el club que ha demostrado ser la mejor cantera de Galicia al meter a tres equipos para los Campeonatos de España, ya que además del júnior y el infantil, la semana que viene jugará en Alcañiz el juvenil. Solo se quedó fuera en alevín. Además, las chicas del equipo sub 16 también están clasificadas para su Nacional. Un trabajo que tendrá su premio.
