Una es la técnica y la otra, la fuerza. Una, jugadora de pádel de toda la vida y la otra llegó previo paso profesional por el tenis. Así es la pareja número uno del mundo formada por Alejandra Salazar (Madrid, 1985) y Marta Marrero (Las Palmas de Gran Canaria, 1983). Ambas defienden título en la parada coruñesa del World Padel Tour, una prueba muy abierta pero en la que esperan prolongar su reinado, tras meterse en cuartos al vencer ayer 6-0, 6-0 a Vane Alonso e Isa Domínguez.

- ¿Guardan un buen recuerdo de A Coruña tras ganar el año pasado?

-(Alejandra) A Coruña nos gusta mucho, tenemos muy buenos recuerdos y muy buenas sensaciones de cómo salió el año pasado, así que ojalá podamos repetir.

-(Marta) Estamos contentas de volver a A Coruña. Nos fue muy bien porque ganamos el torneo y estamos súper contentas de volver a jugar ante esta gran afición.

- ¿Responde el público?

-(Alejandra) El público respondió fantástico el año pasado. Estuvo muy lleno, sobre todo los últimos días que es cuando puede venir la gente. Lo recordamos muy lleno, la gente animando mucho y todos nos sentimos muy bien aquí.

-(Marta) Gracias al éxito que tuvo el año pasado se ha vuelto a hacer aquí. El público se ha volcado desde las primeras rondas, hay mucho seguimiento y estoy segura de que el pabellón estará a tope el fin de semana.

- ¿Quiénes serán sus rivales para revalidar el título?

-(Alejandra) Estamos todos muy igualados. Cualquiera de las cinco o seis primeras parejas del mundo podemos ganar el torneo.

-(Marta) Está muy abierto, el pádel se ha igualando muchísimo y cualquiera puede ganar entre las seis u ocho primeras parejas. Se demostró en Santander.

- ¿Es más difícil llegar o mantenerse en el número uno?

- (Alejandra) Ambas cosas. Llegar es sin duda muy complicado porque hay que ganar muchos torneos y estar muy bien físicamente para aguantar todo el año. Al final es un premio a la regularidad. Es difícil pero mantenerlo va a costar mucho porque tienes que seguir en la misma línea. Ojalá podamos estar bien de salud y sin lesiones y dar nuestro cien por cien para sacar cada partido. Al final es un cúmulo de cosas. Cuesta mucho.

-(Marta) Las dos cosas. Es complicado llegar y es más difícil mantenerlo. Estamos tranquilas, somos conscientes de que no va a ser fácil. Vamos en alerta a todas las rondas porque podemos perder contra cualquiera. Esto es positivo.

- Dicen de ustedes que son una pareja muy compensada. ¿Cuáles son las claves de su éxito?

-(Alejandra) Es importantísimo llevarse bien en la pista, tener respeto por el compañero, apoyarlo siempre y recibir eso del otro. Tener mucha tolerancia porque los dos tenemos los mismos objetivos. Y saber cómo comunicarse para que no molesten las cosas porque estás con los nervios a flor de piel y puedes decir algo que le moleste al otro.

-(Marta) Tenemos mucha confianza la una en la otra y nuestros juegos se complementan a la perfección. Cada vez la adaptación es mejor. Somos dos chicas valientes e intentamos dar lo máximo.

- Alejandra es padelista de toda la vida y Marta viene del tenis. ¿Qué ventajas e inconvenientes se encuentran?

-(Alejandra). La ventaja es que quizás conoces un poco más cómo jugar al pádel. Las que han jugado al tenis tienen una gran competitividad y capacidad de concentración y buena volea, ataque y pegada. Son grandes competidoras y lo ponen muy difícil.

-(Marta) A nivel de conocimiento del deporte, sobre todo la táctica, voy con retraso con el resto de compañeras porque el tenis es otro deporte y no tiene nada que ver. Pero el tema competitivo del tenis me ha ayudado a dar pasos más rápidos.

- ¿Nota, Alejandra, que cada vez hay más jugadoras que ya han empezado en el pádel directamente como usted?

-(Alejandra). Se ve que ya desde muy pequeñas empiezan con el pádel. Eso se nota en las generaciones que vienen, que ya tienen muchísima base y muchas horas de entrenamiento. Eso será buenísimo para el futuro del pádel. Y ya no solo pasa en España, sino en países europeos y eso hará que tengamos en unos años un circuito más mundial.

- ¿Y Marta se imaginaba este éxito cuando cambió de raqueta?

-(Marta) No me imaginaba que me fuese a ir tan bien. Este es mi sexto año y la verdad es que estoy muy satisfecha con lo que estoy consiguiendo. Empecé sin ninguna meta, totalmente como hobby. Salía del tenis y la verdad es que no me apetecía nada competitivo. Me empecé a enganchar, a hacer competiciones a nivel local en Barcelona y me volvió a salir la vena competitiva hasta el día de hoy.

- ¿Se ven como Bela y Lima, ganando casi hasta aburrir?

-(Alejandra) No lo creo. El año pasado ganamos varios torneos sin ceder un set pero no es comparable a la trayectoria de estos dos cracks. Nos quedarían trece años y no nos dará tiempo. Ojalá podamos seguir ganando torneos y por qué no, empezar aquí en A Coruña.

-(Marta) Lo tenemos complicado, más que nada por la edad. Lo que está consiguiendo Bela no lo va a poder igualar nadie.

- ¿Existen muchas diferencias entre el circuito masculino y el femenino?

-(Alejandra) Tenemos varias pruebas menos y las condiciones económicas son inferiores. Estamos luchando para que se iguale o por lo menos se mejore en gran medida. El pádel femenino tiene mucho tirón, la gente demanda nuestros partidos y eso se tiene que ver recompensado con una valoración mayor de nuestro trabajo.

-(Marta) Se están dando pasos pero está claro que la diferencia es muy grande. Espero que poco a poco se vaya equilibrando. El tenis está en un momento de equilibrio, los dos circuitos tienen similares pruebas y misma dotación económica. Y este tiene que ser el objetivo del pádel. Que más jugadoras, y no solo las cuatro primeras, puedan dedicarse en exclusiva a entrenar y a vivir del pádel.