El colombiano Fernando Gaviria (Quick Step) demostró que es el mejor esprinter del Giro con un triunfo inapelable, el tercero que logra en la edición del Centenario, en la etapa más larga, entre Forlì y Reggio Emilia, de 229 kilómetros, en la que el holandés Tom Dumoulin (Sunweb) mantuvo la maglia rosa de líder.

Gaviria, debutante en la carrera rosa con 22 años, llegó a la salida de Cerdeña "a aprender" y enseguida tomó el pulso al Giro con el triunfo en Cagliari. Repitió en Mesina y en la Italia peninsular señaló con sus dedos el número tres. Un triplete para el Misil, que supone la cuarta victoria colombiana y la vigésima quinta de los corredores de su país en la carrera italiana.

Fue una jornada maratoniana, más de cinco horas sobre la bicicleta, previsible, de las que tratan de tachar los favoritos en su calendario sin incidentes. Dumoulin conservó el liderato.