La décima edición de la Copa Confederaciones 2017 de Rusia empieza hoy con Alemania, actual campeona del mundo, Chile, campeona de la Copa América, y Portugal, campeona de Europa, como los combinados más potentes para llevarse el título.

Desde hoy al 2 de julio, Moscú, San Petersburgo, Kazán y Sochi acogerán a la nómina de selecciones clasificadas, que completan la anfitriona Rusia, Camerún, Australia, México y Nueva Zelanda, como ensayo general ante la gran cita del Mundial del próximo año.

En lo puramente deportivo, Alemania, actual campeona mundial se presenta en Rusia con una convocatoria poco experimentada bajo el brazo, con solo dos de los jugadores que alcanzaron la gloria en Brasil y con afán de experimentar con jóvenes que tienen una oportunidad de oro para hacerse un hueco bajo las órdenes de Joachim Löw.

Encuadrada con Camerún, Chile y Australia, el exvalencianista Mustafi, el jugador del PSG Julian Draxler y el guardameta del barcelona Ter Stegen son las caras más conocidas de una selección que busca levantar el único título internacional que le falta.

Con la motivación de desbancar a Die Mannschaft, se encuentra la selección chilena, actual doble campeona sudamericana tras derrotar a la Argentina de Messi por penaltis tanto en la Copa América que organizó en 2014 como en la edición Centenaria de los Estados Unidos en 2016, sus dos primeros títulos.

La roja, que cuenta con Juan Antonio Pizzi, como seleccionador, tratará de plantar cara en el grupo a la actual campeona del mundo en su primera aparición en la Copa Confederaciones, sustentados por el delantero del Arsenal Alexis Sánchez, y secundado por Arturo Vidal o Claudio Bravo, aunque este está tocado y se perderá el debut.

Por otro lado, la reciente campeona de Europa, Portugal, se encomienda a la figura de Cristiano Ronaldo para volver a hacer historia. Después de sufridas rondas y una agónica victoria en la final de París ante la anfitriona Francia, el combinado luso pondrá de nuevo a prueba su nivel competitivo, con Fernando Santos como líder en el banquillo.

La selección mexicana, representante de la CONCACAF como ganadora de la Copa Oro en 2015 y ganadora en 1999, tratará de hacerse un hueco entre las favoritas para dejar su huella. Viene de dos resultados positivos ante Honduras y Estados Unidos en la fase de clasificación para la próxima Copa del Mundo, en la que se sitúan como líderes por delante de Costa Rica y los propios estadounidenses.

Tras la vergonzante derrota por 7-0 ante Chile en la pasada Copa América, el combinado de Juan Carlos Osorio busca proyectarse en un torneo propicio para dar relevancia a jugadores como Araujo, Alanís o Reyes, junto a las figuras Guardado, Vela, Chicharito Hernández o los hermanos Dos Santos.

Mientras, Rusia tratará de explotar su rol de anfitriona para emular esas mismas intenciones. En su primera aparición en el torneo y tras una mala actuación en la Eurocopa 2016, el papel del combinado ruso es una incógnita, obligado a mejorar su rendimiento en los torneos venideros y que no pondrá contar con su estrella Dzagoev por una lesión en el muslo.

Camerún, campeona de África, y Australia, campeona asiática y que viene de perder 0-4 en un amistoso ante una Brasil B, intentarán elevar su nivel competitivo y de experiencia, mientras que el papel de cenicienta será para una Nueva Zelanda que tratará de no ser goleada en todos sus partidos, empezando por su estreno ante la anfitriona.