El excandidato a la presidencia del Barcelona Agustí Benedito dice adiós al voto de censura que había emprendido una vez que la Junta Directiva dio por terminado el plazo de entrega este miércoles a las 23.30 horas, cuando tenía 12.504 firmas en su haber que han sido destruidas ante notario. Benedito anunció, además, una demanda a la Junta Directiva para dirimir por vía de la justicia si el plazo debía haber sido hasta el 2 de octubre.

"Cardoner dio el miércoles por cerrado el plazo de recogida de firmas. Desde que el club cierra el plazo, y lo hace porque puede, el voto de censura queda cerrado. Dijimos que seguiríamos recogiendo firmas hasta el 2 de octubre, pero seguir aceptándolas sabiendo que ya no tendrán validez... Por coherencia teníamos que dar por cerrado el voto de censura, tal y como hacemos", aseguró.

Benedito explicó que de haber podido recoger hasta el 2 de octubre, el plazo que sigue defendiendo al no contar los sábados como días hábiles, probablemente hubieran llegado a las 16.570 firmas necesarias para poder llevar a cabo el voto de censura y emprender la votación entre los socios.

"Teníamos cerca de 110 envíos con papeletas pendientes de llegar, esperamos recibir unas 1.500 firmadas. Me consta que están enviadas por correo y estamos esperándolas. El miércoles a las 23.30 horas teníamos recogidas y validadas, formalmente llenas como exige el club, 12.504. Si les sumas las 1.500 que teníamos confirmadas, estábamos cerca de unas 14.000", comentó en rueda de prensa.

"Con estas firmas, añadidas si no hubieran atentado contra el derecho del socio a las de un partido en el Camp Nou, era previsible que llegáramos. Estamos ante un eventual aseguramiento del voto de censura. Nunca los socios del Barça han mostrado así su oposición a una Junta Directiva", destacó Benedito.

El socio promotor denunció lo "complicado" que ha sido el proceso de recogida de firmas debido a la actitud de la Junta y los constantes "palos a las ruedas y problemas" que han tenido, entre ellos el tema de los plazos. Para Benedito, que el club se enrocara en poner el 27 de septiembre como plazo, es debido al miedo que tenían.

"Quizá por esto Cardoner y la Junta, pese a que me consta que hay discrepancias dentro de la Junta, han hecho imponer el ala dura, la de ir contra el socio y la esencia del club, y han decidido cortar por lo sano no fuera que consiguiéramos las firmas, que las conseguíamos, y así asegurarse el seguir aferrados a la silla", cargó contra la Junta.

Por ello, Benedito interpondrá una demanda a la Junta Directiva no para poder contabilizar las firmas que pueda acabar recogiendo, dado que, aunque estén fuera de plazo y haya cortado la recogida, afirmó haber recibido 200 firmas en la mañana de ayer, sino para que la justicia dictamine si el plazo correcto era el día 27 de septiembre o el 2 de octubre. "Va de camino al Barça un burofax", anunció.