El Valencia derrotó al Leganés en un partido en el que refrendó una semana más la fortaleza con la que ha empezado la competición, en la que se mantiene segundo en la tabla.

Sin disponer de excesivas ocasiones en el primer periodo, el equipo valenciano tuvo paciencia y supo aprovechar las que se le presentaron en el segundo ante un equipo ordenado, pero que al final claudicó.

Tras una primera parte nivelada, el Valencia impuso poco a poco su ley tras el descanso y marcó tres goles a un rival que solo había recibido cinco hasta la fecha.

Parejo, de falta en el primer periodo; Rodrigo, de cabeza, y Santi Mina, de penalti, materializaron la victoria de un Valencia que todavía no ha perdido en la Liga.