El capitán del Hapoel Beersheva, Elyaniv Barda, salió ayer del hospital después de que un balonazo en el pecho le interrumpiera el ritmo cardíaco en un entrenamiento. Los médicos del Centro Soroka de Beersheva advirtieron a Barda, de 35 años, de que su corazón aún tiene que recuperarse del accidente que casi lo mató en pasado martes, cuando recibió un fuerte balonazo