El Madrid se reivindicó en el clásico con una victoria de prestigio por 87-75 en la Euroliga ante su más enconado rival, el Barcelona Lassa, tras dominar en defensa y llevar el ritmo y el peso del partido en todo momento.

Pero más allá de la victoria madridista el partido se recordará por un canastón de Luka Doncic, casi desde su línea de fondo, en el último instante del tercer cuarto, transmutándose en el mismísimo Sergio Llull.

Al final, triunfo local 87-75. El Madrid sale victorioso y reforzado, y el Barcelona derrotado y con un poco más de crisis. Es lo que tienen los clásicos. También en Europa.