Después de cerrar el año 2017 con dos derrotas, el Leyma Coruña consiguió abrir el 2018 con una victoria trabajada y merecida ante Clavijo, 80-66. En la primera mitad la ausencia de Sonseca complicó la tarea reboteadora y también ofensiva a los coruñeses. Pero las muñecas de los tiradores se fueron calentando y en el último cuarto el equipo de Aranzana consiguió mejorar bajo el aro y despegarse definitivamente en el marcador.

Los catorce puntos de diferencia con los que acabó el partido para los coruñeses son una brecha demasiado grande para la igualdad que se vio sobre la pista. Pero lo que cuenta es que el Leyma acaba la primera vuelta en la parte cómoda de la clasificación.

El primer cuarto anunció que el choque sin Edu Sonseca iba a ser mucho más complicado Edu Sonseca para los locales. En los diez minutos iniciales, el Leyma sufrió la ausencia del pívot madrileño, sobre todo cuando el tiro exterior no funcionaba bien y los rebotes eran para el rival. Los de Gustavo Aranzana consiguieron una sustanciosa ventaja (18-10) al endosarle a Clavijo un parcial de 11-0 pero cuando los triples no entraron, el equipo riojano le devolvió el bofetón a los coruñeses con una estadística de 2-12 para acabar el cuarto por delante 20-22.

El segundo parcial siguió la tónica del fallo en el tiro desde lejos, pero en esta ocasión los jugadores visitantes tampoco estuvieron acertados por lo que el conjunto naranja pudo neutralizar los dos puntos de desventaja con los que había comenzado el cuarto. Clavijo defendió bien durante los diez minutos previos al descanso y la anotación total del parcial quedó en un escaso 13-9.

Continuó el partido con problemas para el Leyma, que vivió un tercer cuarto complicado en el que llegó a ir por debajo en el marcador. Pero una vez más el tiro exterior sacó de problemas a los de Aranzana. Dos triples cerraron el parcial para el equipo naranja que pudo, con estos seis puntos, acabar por encima de Clavijo 54-50. La igualdad de estos diez minutos se rompió con los triples de Trevor Cooney y Jesse Chuku en los últimos instantes. Estas dos jugadas dieron aire a los coruñeses, quienes llegaron al cuarto definitivo con una escasa renta de cuatro puntos, pero con las fuerzas intactas para afrontar los diez minutos finales.

El Leyma Coruña quería la victoria, y empezó los diez últimos minutos dando un puñetazo encima de la mesa y dejando claro cuáles eran sus intenciones. Zach Monaghan anotó una canasta en la primera jugada del cuarto y además recibió una falta personal por lo que también tuvo un tiro adicional, que falló. El equipo coruñés se puso siete puntos por delante y con mucha seriedad, y tres canastas triples, consiguió atar el choque. Además, Clavijo estuvo desacertado en este último cuarto en el que anotó dieciséis puntos, por los veintiséis de los locales.

El 80-66 final dio la victoria justamente al Leyma, pero la diferencia entre los dos equipos no fue tan grande como parece con estos catorce puntos que refleja el marcador. Después de este partido, el equipo de Gustavo Aranzana sigue con más derrotas que partidos ganados pero por lo menos acaba la primera vuelta con el buen sabor de boca que dan las victorias.