El Liceo se dejó tres puntos y el liderato con su derrota de ayer ante el Vendrell (4-1) en el que fue uno de sus peores partidos de la temporada. Los verdiblancos fueron vulnerables, apenas crearon ocasiones y según fueron avanzando los minutos y creciendo la ansiedad, cayeron en precipitaciones y demasiadas individualidades. El Barcelona, que hoy se impuso al Arenys de Munt, le superó en la clasificación que ahora manda con dos puntos de ventaja sobre los coruñeses.

Al Liceo le estaban costando los últimos partidos y el que juega con fuego se quema. Quizá en la primera parte fue superior, pero sin llevar demasiado peligro a la portería de Gerard Camps. Un palo y la azul a Josep Lamas, en la que Malián paró la directa a Rocasalbas, fueron los primeros avisos. Aún sin ocasiones, los verdiblancos tampoco pasaban apuros en defensa y la acción de Roger Rocasalbas para el 1-0 antes del descanso les pilló desprevenidos.

En el segundo tiempo, los locales salieron claramente más enchufados pero empató Josep Lamas con una asistencia de David Torres. Los liceístas pudieron ponerse por delante con una directa fallada por Eduard Lamas. Y buscaron el segundo con disparos de Coy desde todas las distancias. El que no perdonó a bola parada fue Jordi Ferrer. Aunque paró en primera instancia Malián la directa, el rechace le favoreció para el 2-1. El tercero, de Edu Fernández, fue el mazazo definitivo pero no el último ya que todavía David Torres fallaría una nueva directa y llegaría el cuarto, obra de Jordi Ferrer.