La Subdelegación del Gobierno en A Coruña acogió ayer la reunión de seguridad previa a la celebración del Rally de A Coruña. A esta cita acudieron representantes de la Comandancia de la Guardia Civil y de la subsección de Tráfico, de la Policía Nacional, de la Federación Gallega de automovilismo, de Protección Civil, de la organización y de los concellos que forman parte del recorrido de la prueba. De esta reunión salió el plan de seguridad a seguir durante la prueba, y en él se definieron los medios sanitarios disponibles, las rutas de evacuación de cada uno de los ocho tramos cronometrados, y los lugares prohibidos para los espectadores.

Además, en lo que coincidieron los asistentes fue en la importancia de concienciar al público asistente para que conduzca con cautela en sus desplazamientos por la zona de la competición, y para que evite transitar por las cunetas o la calzada durante el desarrollo de la prueba. La organización pide que los asistentes esperen al final de la competición para moverse de un lugar a otro o para regresar a casa.

La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil prevé desplazar a 51 agentes con 21 vehículos, con el apoyo de un helicóptero, mientras dure el rally. Estas unidades ayudarán a la organización a controlar la apertura y cierre de cada tramo así como el paso de gente no autorizada.

También, y para evitar la comisión de actos delictivos, Policía Nacional y Guardia Civil desplegarán varias patrullas en su respectiva zona de competencia.