Los San Antonio Spurs volvieron a la senda de la victoria de la NBA al ganar 100-98 a los Memphis Grizzlies en una jornada en la que el astro LeBron James y los Cavaliers se redimieron tras sus malos resultados recientes.

En San Antonio, la victoria esta vez salió cara. Los de Gregg Popovich, en una de las temporadas más convulsas de las últimas dos décadas, los locales se impusieron a unos Grizzlies que suman 14 derrotas al hilo. Y tuvieron que sudar mucho para ganar.

El pívot español Marc Gasol se adueñó de las pinturas y con 23 puntos y 10 rebotes fue el mejor de la contienda. No tuvo piedad de su hermano Pau, desaparecido con solo dos tantos y siete capturas en 23 minutos. El argentino Manu Ginóbili, en la línea del español, se quedó en cuatro puntos.

Los texanos, en los que regresó LaMarcus Aldridge tras ser baja por lesión en el último encuentro, tuvieron que recurrir al veterano base francés Tony Parker para acabar sumando un triunfo tan importante como poco convincente. El galo sumó 23 tantos en únicamente 25 minutos.