El Palacio de los Deportes de Riazor acogió ayer la quinta edición del festival internacional de patinaje artístico en favor de las enfermedades raras, organizado por Fegerec (Federación Galega de Enfermidades Raras e Crónicas). Como en las cuatro ediciones anteriores, la respuesta del público fue espectacular y se consiguió un gran colorido en las gradas. El dinero recaudado en la venta de entradas irá destinado a la investigación de las enfermedades raras, así como a la visibilización y a atención de estos pacientes.

El espectacular cartel de esta gala atrajo a miles de amantes del patinaje, que vieron de cerca a grandes jóvenes campeones como las parejas italianas formadas por Sara Venerucci y Marco Garelli (subcampeones del mundo sénior) y Rebecca Tarlazzi y Luca Lucanoni (campeones del mundo sénior). Dentro del patinaje gallego participaron, entre otros muchos, Manuela Vila (CP Maxia) campeona de España cadete; Unai Cereijo (CP Maxia), campeón de Europa y de España alevín y Nadia Iglesias (CP Maxia), bronce del Mundo y campeona de Europa y España júnior.

Pero además de estas grandes estrellas, también se volcaron con las enfermedades raras los clubes CP Alquimia de Carral, el CP Axel de Arteixo, el CP Carpa de Vigo, CP Fontiñas de Santiago, CP Ánfora de Cangas, CP Porriño, CP Campus Stellae de Santiago, CP Ribex de Porriño, CP Valladares de Pontevedra y los también pontevedreses CP Condado y CP Gondomar.

Pero el momento más esperado fue el acto de clausura en el que 450 patinadores, guiados por la banda sonora de la película Forrest Gump, escenificaron una coreografía que representaba el ciclo evolutivo de la vida desde la niñez hasta la madurez.