Alejandro Valverde (Movistar) ganó ayer su tercera Volta a Catalunya tras la séptima y última etapa, con salida y llegada en Barcelona, en la que se impuso en solitario el británico Simon Yates (Mitchelton).

El ciclista murciano, ganador de la prueba en 2017 y 2009, acumula ya tres triunfos en carreras por etapas esta temporada tras conquistar la Vuelta a Valencia y la Vuelta a Abu Dabi.

El español supo gestionar su ventaja en la general en esta última etapa de 154,8 km, marcada por la caída de Egan Bernal (Sky), que iba segundo de la general. "Es una auténtica pena porque el chaval lo estaba haciendo muy bien", dijo Valverde tras la carrera, en referencia a su rival.

"A Bernal se le han hecho unas radiografías y se le van a hacer más pruebas en el hombro", explicó el equipo Sky en un comunicado sin dar mayores detalles.

"Todo el mundo está un poco disgustado. Todos habían trabajado mucho para él esta semana", dijo el director deportivo Brett Lancaster, destacando como el trabajo de Bernal demuestra que "está en un gran nivel y promete para el futuro".

El colombiano se cayó a falta de 6 km para el final, teniendo que abandonar y dejando el segundo cajón del podio a su compatriota Nairo Quintana (Movistar), a 29 segundos de Valverde.

El tercer puesto de la Volta fue para el francés Pierre-Roger Latour (AG2R-La Mondiale), principal beneficiado por la caída de Bernal, que acabó a 47 segundos del ganador de la prueba.

"Ha sido una vuelta muy luchada desde el primer momento, muy merecida por el equipo desde el primer día, todos los días han sido especiales porque ha sido un gran trabajo", explicó Valverde, que se mostró contento por su gran inicio de temporada.

"Ni mucho menos esperaba volver así porque todos sabemos que vengo de una caída muy dura en el Tour, cuando empecé a entrenar empecé muy poco a poco, muy suave, recuperando sensaciones, pero ni muchísimos menos esperaba tener estas sensaciones", explicó.

"Estoy por decir que son mejores que las del año pasado por esta época", añadió, asegurando que tiene una "compenetración muy buena" con Quintana, al que ayudó en la etapa de ayer a asegurar el segundo puesto del podio, frente a las posibilidades que tenía Yates.

El británico, cuarto en la general, entró en solitario en la meta de Barcelona con 18 segundos de ventaja sobre el español Marc Soler (Movistar), mientras que tercero fue Latour, a 18 segundos del ganador de la etapa.

"Fue una etapa difícil y rápida, no soy tan rápido como algunos de mis rivales así que decidí marcharme pronto y funcionó", dijo Yates tras la etapa, lamentando que "quería estar en el podio, pero creo que al final soy cuarto".

El británico se llevó la etapa bajo la lluvia en las calles de Barcelona, tras saltar del pelotón junto a Soler para unirse a los supervivientes de una escapada de diez que se había destacado 20 kilómetros antes.

Por detrás, el duelo entre Bernal y Valverde alternando sus ataques ponía ritmo en el pelotón, que acabó neutralizando al grueso de la fuga. Yates acabó atacando a cuatro kilómetros de meta sorprendiendo a Soler y llevándose la etapa.

Por primera vez en las casi 100 ediciones de esta ronda catalana, ayer se disputó una prueba femenina denominada ReVolta en Barcelona, que ganó la estadounidense Lauren Stephens (Cylance ProCycling).

La española del Movistar Lorena Llamas acabó segunda, por delante de su compatriota Sofía Rodríguez (Sopela), que fue tercera.