El derbi de Manchester centra hoy toda la atención en la jornada 33 de la Premier League, ya que el City se proclamará campeón si supera en su estadio al United, lo que supondría un bálsamo inmejorable para paliar el desastroso resultado ante el Liverpool en la Liga de Campeones.

Tras una temporada que ha dominado con puño de hierro, sumando 27 victorias y encajando una sola derrota en 31 partidos, el City se encuentra ante su primera posibilidad matemática de ganar la tercera Premier de su historia y repetir los éxitos de 2012 y 2014.

Pase lo que pase en el Etihad Stadium, la alegría para el equipo local no será completa. Si empata o pierde porque deberá aplazar la consecución título y, si consigue el objetivo, porque el campeonato se da por descontado hace semanas y en el horizonte aparece un partido bastante más importante, la vuelta europea ante el Liverpool del próximo martes, cuando intentará remontar un 3-0 adverso.

Por ello, Pep Guardiola, que a buen seguro evitará la hipotética celebración en la medida de lo posible pensando en la Champions, podría reservar jugadores ante un United cuya única opción real de lograr un título esta temporada se circunscribe a la FA Cup, donde se encuentra en semifinales. En cuanto a los citizens, están a punto de sellar su doblete tras conquistar en febrero la Copa de la Liga.

El otro gran duelo regional de la jornada es el derbi de Merseyside que disputarán Everton y un eufórico Liverpool en Goodison Park. Los reds no podrán contar con el máximo artillero del continente, el egipcio Mohamed Salah, que se retiró lesionado ante el City, para buscar un triunfo que podría aupar a los reds a la segunda plaza si cae el United.

Además, el Chelsea apura sus reducidas opciones de lograr el cuarto puesto tras encajar tres derrotas en las últimas cuatro jornadas. Los blues, que reciben al West Ham, se encuentran a ocho puntos de un Tottenham que espera imponer su superioridad en campo del Stoke City.