Sergio Campos (A Coruña, 1996) se despertó ayer con la mejor de las noticias. El nombre del nadador del CN Coruña figuraba, junto a otros como los de Mireia Belmonte o Jessica Vall, en la convocatoria del equipo nacional absoluto para participar en los Juegos del Mediterráneo del 21 al 26 de junio en Tarragona.

- ¿Objetivo cumplido?

-Sí, estoy muy contento. Entrar en el equipo español era el objetivo que nos habíamos marcado esta temporada. Fue una pena que en el Open me coincidiera el mismo día la final de 100 espalda con la de 100 libres, porque eso hizo que no pudiéramos clasificar para el Europeo el relevo de 4x100 como hicieron los del 4x200.

- ¿Cómo superó esa frustración de quedar cuarto en 100 espalda y justo después, eliminado de la final de 100 libres?

-Fue bastante duro, tuve que aislarme. Al día siguiente hablé con Juan Segura y los dos dijimos que había que pasar página e intentar volver a entrar en competición. Dejé de lado el 200 libres y me centré en 50 espalda. Fue más una prueba psicológica que física, porque a nivel físico ya sabía que estaba bien.

- Se recupera y queda segundo en 50 espalda por delante de Aschwin Wildeboer, explusmarquista mundial.

-¡Casi estaba más contento por ganarle a él que por la medalla! Desde pequeño siempre había sido mi referencia.

- ¿Ahora cuál será la agenda?

-Hay que seguir entrenando y hacerlo bien en los Juegos del Mediterráneo. Me centraré más en 50 y 100 espalda y 50 y 100 libres. Dejaré ya de lado el 200.

- ¿Le sorprendió batir el récord gallego de 200 libres?

-Me sorprendió bastante. Sabía que podía hacerlo bien porque había hecho buen tiempo el día anterior en 400, pero no me imaginaba que tanto. Salió bien.

- ¿Por qué esa reconversión de espaldista a crolista?

-Siempre nadaba 100 libres en los Campeonatos de España, pero más por rellenar, para no tener ningún día sin competir. Y siempre me salía bien. Así que el año pasado nos marcamos como reto batir el récord gallego, lo conseguimos y seguimos por ese camino.

- Este año, Juegos del Mediterráneo. La temporada que viene, ¿más y mejor?

-No me gusta hablar de objetivos para la próxima temporada cuando aún estamos en medio de esta. Dependerá de muchas cosas, de si sigo aquí en A Coruña o si decido pedir una beca para ir a la Blume para entrenar con el resto de velocistas del equipos español.

- ¿Ya no está en Pontevedra?

-Poco antes del Open me vine para casa. Allí estaba un poco agobiado. Luisa (Domínguez) y Fernando (Zarzosa) me siguen llevando la planificación, pero yo entreno en el Club Natación Coruña con Adrián Costa, Raúl Solleiro y Raquel Martínez. Estoy bastante bien.

- Su compañero allí, Marcos García, también recibió la llamada.

- Casi estoy más contento por él. Ya en el Open cuando vi que era segundo en las dos pruebas me alegré mucho. Después de tantos años, y todo lo que ha pasado, se lo merecía más que nadie.