El Maristas está a solo una victoria del ascenso a Liga Femenina 2 tras imponerse ayer al Tirso por 80-73 en el segundo partido de la fase que se está disputando en el pabellón colegial coruñés. Solo le falta un último paso que tiene que dar esta mañana contra el Megacalzados Ardoi (12.00 horas). Ambos llegan con dos triunfos en su haber. El que gane, tocará el cielo. Rubén Vázquez y las suyas ya lo rozan con los dedos. La defensa, cerrar el rebote y correr a la contra, además de mejorar un poco los porcentajes en los tiros de tres, tendrán que ser sus fuertes, como lo han sido hasta ahora, para cerrar la temporada con la guinda del pastel.

"Pase lo que pase, hay que pararse a valorar lo que estamos haciendo. Estamos jugando contra equipos con jugadoras de nivelazo, internacionales y que han estado en la máxima categoría. Nosotras somos diez chicas de A Coruña, una de Porriño y otra de Ferrol", analiza Rubén Vázquez. Las fuerzas se prevén muy igualadas. Ardoi tumbó ayer al Lagunak por 58-54, idéntico resultado con el que las coruñesas se impusieron a las vascas en la jornada del viernes. Influirán los nervios y las emociones, algo en lo que el técnico local ha estado trabajando en las semanas previas al inicio de la fase de ascenso.

También le sirvió ayer para manejar un partido muy igualado, sobre todo en la primera parte, con el Tirso. Las cántabras se mantenían en el duelo a base de tiros de tres mientras que el Maristas tiraba de juego interior. Al descanso, 43-40. Igualadísimo. A la salida de vestuarios las coruñesas incrementaron el ritmo en defensa, cogieron muchos rebotes y corrieron. En su seña de identidad, lo que les ha hecho marcarse una temporada triunfal, con solo dos derrotas en todo el curso. Y poco a poco la ventaja fue creciendo. Llegó a la barrera de diez puntos, la superó hasta los 13 con un triple de Bea Gómez, que con 17 tantos fue ayer la máxima anotadora. Pero Tirso daba coletazos. Recortó, se puso a seis, lo que obligó a Maristas a un esfuerzo más para finalmente cerrar el partido. Un triunfo más. Solo queda otro.