Como en cada uno de sus desplazamientos, el Deportivo se verá arropado por su afición esta noche en Vigo. Esta vez serán más de mil los seguidores que se enfunden sus camisetas blanquiazules para ovacionar al equipo e impulsarlo a conseguir los tres puntos ante el Celta.

El derbi, uno de los partidos marcados en rojo por los deportivistas, movilizará a un millar de personas desde A Coruña hasta Vigo para ser partícipes de la fiesta del fútbol gallego. Sin embargo, son menos de los que se esperaría si el partido se celebrase en fin de semana. El incómodo horario, martes y a las diez de la noche, no permite que se desplace un gran número de aficionados. Muchos deberán seguir los pasos de su equipo desde la televisión, mientras los más incondicionales ocuparán su asiento en la casa del eterno rival.

Los seis autobuses que fleta la Federación de Peñas partirán de la explanada de Riazor a las 18.00 horas. Serán aproximadamente 400 deportivistas los que viajen de este modo. Otros lo harán en coches particulares después de haber adquirido su entrada en las taquillas del club coruñés a un precio de 30 euros. Entre todos intentarán darle calor a Víctor Fernández y los suyos, haciéndolos sentir en casa a más de 150 kilómetros.