Álex Bergantiños (A Coruña, 1985) se erigió el domingo como el jugador más destacado contra el Granada, pero rehúye los elogios. Su tarea en el campo, argumenta, consiste en hacer que brillen otros por medio de una labor alejada de los focos. Ese cometido lo asume con naturalidad, consciente a la vez de que para que el equipo alcance el objetivo de la permanencia deben ser otros los que asuman el protagonismo y la atención.

-¿Sabe ahora mejor el punto contra el Granada después de la decepción que les supuso el domingo?

-Tenemos un punto más que en la primera vuelta, que perdimos contra el Granada. Tenemos que marcarnos esa línea: hacer más puntos que en la primera vuelta. Aquí empatamos contra el Rayo y si ahora le ganamos seguiremos con esa línea. Esa es la idea, seguir mejorando e intentar decantar para nuestro lado esos partidos que están siendo igualados.

-¿Qué les falta para que esa igualdad se rompa a su favor?

-Partidos como el del otro día a los veinte minutos podíamos ir perdiendo 0-2 y luego lo tuvimos de nuestro lado, pero se nos escapó en una jugada a balón parado. Son pequeños detalles, pero al final los partido pasan por muchas fases, hay mucha igualdad y a los equipos de abajo a todos nos cuesta sumar.

-En esos pequeños detalles se les siguen atragantando las acciones a balón parado?

-Quizá el año pasado fue más exagerado todavía. En cualquier balón lateral sufríamos mucho y este año hemos encajado alguno, pero lo que llama más la atención es que nosotros no estamos haciendo goles en ese tipo de acciones. Eso compensaría un poco esa balanza porque hoy en día a balón parado se hacen muchos goles porque de juego estático es difícil hacerlos. Jugadas como la del otro día son difíciles de defender porque son de segunda o tercera acción y a veces son imprevisibles. Quizá el error fue meternos un poco atrás en la primera acción.

-¿Ha ganado en tranquilidad el equipo durante las últimas semanas después de todo lo que se habló de lo que ocurrió en Madrid y sobre la situación del entrenador?

-Sí. La plantilla también está más completa y estamos entrenando mejor. Ahora somos veintitantos jugadores y ya no hay tantas lesiones como antes. Sí que es verdad que se está estabilizando un poco todo. La temporada está muy avanzada, ya todos nos conocemos y se está hablando de fútbol, que al final es lo que realmente importa. En ese sentido, la plantilla está más tranquila, sabiendo que es un mes importante, que tenemos rivales directos y que tenemos que sumar lo máximo posible ahora.

-El entrenador ha probado con Celso Borges como su pareja en el centro del campo, ¿qué cree que puede aportar al juego del equipo?

-No sabemos quién jugará, pero lo que sí es cierto es que ha llegado en muy buena forma. Es un jugador con un físico importante, tiene mucho recorrido en el campo y juega fácil y sencillo. Eso nos puede aportar porque es un poco diferente a los mediocentros que teníamos. Todo lo que sea dar prioridad y posibilidades a la plantilla y al entrenador, bienvenido. Se ve que es trabajador y con muchas cualidades, en ese sentido va a aportar. Luego ya dependerá de lo que decida el entrenador y en función del rival.

-El rival de mañana no suele esconder sus planteamientos ni sus intenciones?

-Son un poco imprevisibles en los resultados porque siempre arriesgan mucho. Cuando tienen el día, pueden estar muy acertados; cuando no lo tienen, conceden goles. Juegan con tres defensas muchas veces, incluso con un único central y tienen mucha variedad en cuanto a jugadores. Es un equipo muy valiente y de mucha calidad. Lleva muchos años haciéndolo así y salvándose con comodidad.

-¿Sigue pensando que si usted fue el más destacado contra el Granada es porque el equipo no estuvo acertado?

-Es cierto. Yo soy un jugador más de trabajo, más táctico. Los centrales y mediocentros defensivos no solemos brillar tanto para el público ni para la prensa. Es algo evidente, pasa en todos los equipos, los que destacan siempre son los jugadores más ofensivos. A nosotros nos irá bien si las portadas son para Lucas, para Oriol, para Cavaleiro, para gente de ataque. Eso significará que el equipo está bien, que está haciendo goles y que está dominando los partidos. Luego hay otros jugadores que hacemos un trabajo diferente, más oscuro, y lo que pretendía con esas palabras era reflejar eso: que tanto Juan (Domínguez) como yo tuvimos que recuperar mucho y hacer faltas porque el equipo no estaba junto. Mi intención era reflejar eso, sin darle más importancia.

-Sin embargo está siendo un año en el que en el Deportivo están destacando esos jugadores que comenta?

-Ha habido muchos cambios. En la primera vuelta fuimos de los pocos equipos en los que jugaron casi todos los de la plantilla. El entrenador ha ido cambiando cosas, eso hace que haya menos estabilidad y repercute en los rendimientos. Si te conoces con el de al lado y el equipo está más o menos conjuntado, se consigue que se brille más individualmente. Quizá por eso haya destacado más algún jugador defensivo, porque al equipo colectivamente le ha costado arrancar. Ahora, aunque vamos un poco a ráfagas, estamos mejor. Esperamos conseguir esa estabilidad en el juego que nos haga crecer a partir de ahora.

-¿Es la plantilla suficiente para lo que queda por delante o faltaría alguna pieza más?

-Eso nunca se sabe, eso se ve con el tiempo. Ahora mismo hay tres centrales y si los tres están bien y no hay lesiones, diremos que no hacía falta. Depende un poco de las circunstancias. Al principio tuvimos muchas lesiones en la mediapunta y ahora están todos disponibles. Eso ya va en función de las posibilidades y el riesgo que quiera tomar el club a la hora de traer más gente y de ocupar fichas. En cuanto a número somos jugadores suficientes para sacar esto adelante, creo que el nivel de la plantilla es suficiente para dejar a tres equipos por debajo. Si viene algo para mejorar o para potenciar esas posibles bajas que podamos tener a lo largo de la temporada, bienvenido sea.