Oriol Riera y Pablo Insua fueron los únicos futbolistas de la primera plantilla del Deportivo que no viajaron ayer a Mugardos para participar en el último amistoso de la pretemporada. El delantero catalán se quedó en A Coruña a causa de unas molestias en una de sus rodillas, mientras que el central de Arzúa estaba aquejado de una ligera lumbalgia, aunque ayer también se especulaba que la verdadera razón es que ya está a punto de producirse su salida en calidad de cedido. Tampoco estuvo Manuel Pablo, pues el veterano capitán blanquiazul continúa con el programa de recuperación de la lesión muscular que sufrió durante la primera semana de la pretemporada.