Se nota que el Deportivo ha metido una marcha más. Ya no es aquel equipo que cayó en pretemporada contra el Lugo en el Emma Cuervo. Ayer demostró que ha madurado, que los jugadores se entienden y que ni un amistoso lo frena. Aunque no fue capaz de pasar del empate tras una segunda parte algo floja. Algunos titulares se mezclaron con los menos habituales, que no desperdiciaron la ocasión de crear dilemas a Víctor Sánchez, que ahora tiene plantilla entre la que elegir.

El XVII Torneo Victoria Memoria Moncho Rivera lleva el sello coruñés marcado a fuego, así que Lucas Pérez decidió coger el mando. Antes de que llegase el primer gol, el conjunto blanquiazul elaboró un juego combinativo, de toque, que muchos aficionados comentaban desde la grada. Les gusta este Dépor. El Lugo apenas podía moverse más allá de su campo. Quizá alguna jugada aislada a base de pelotazos, pero todo quedaba en nada. El delantero de Monelos, cuando no había pasado ni un cuarto de hora de partido, se plantó delante de Javi Pita y tras un buen pase de Cardoso, marcó un gol de espuela.

No contento con eso, Lucas repitió dos minutos después. Él solo condujo el balón por la banda izquierda hasta que vio el momento perfecto para batir al portero del Lugo. En esta primera parte, el equipo que dirige Luis Milla poco incordió a Manu Fernández, que debutaba bajo palos. Molinero intentó despertar a su equipo, y acabó consiguiéndolo con una falta. Golpeó con la zurda y el balón entró por la escuadra sin que el meta asturiano pudiese hacer nada para evitarlo. Golazo. Aún así, Manu superó su primer examen con nota.

Juan Domínguez, con un remate al palo, estuvo a punto de hacer el tercero. Pero el marcador no se volvió a mover hasta después del descanso, y esta vez la balanza se inclinaba hacia el lado lucense. Mientras los fabrilistas intentaban aprovechar su momento y disfrutar de Riazor, Joselu marcó el empate tras un centro por la derecha de Iriome. Esta vez el portero encargado de proteger la portería blanquiazul era David Gómez. Tablas y vuelta a empezar.

El Lugo decidió ser el dueño del segundo tiempo, como el Deportivo lo había sido del primero. Los pupilos de Milla trabajaron por las dos bandas en busca de un camino hacia la portería. Pero la defensa deportivista cumplió. También destacaron Álex Corredera y Cardoso en esta segunda parte, que se atrevieron con potentes disparos a puerta sin fruto. Entre intentonas de unos y otros sonó el pitido final. Con el 2-2, los penaltis decidirían quién se quedaba con el Trofeo Victoria Memorial Moncho Rivera. Y fue el Deportivo, que acertó cinco lanzamientos desde los once metros por los cuatro del Lugo. El campeón fue el cuadro local, pero en realidad quien ganó ayer fue la Cocina Económica, ya que la recaudación ascendió a 27.215 euros.