La afición del Deportivo empieza a recitar de carrerilla la alineación de su equipo, síntoma de que la fórmula de Víctor Sánchez del Amo está dando buenos resultados en este arranque de campeonato. El técnico repitió once en Vallecas, donde utilizó de salida a los mismos protagonistas que en Mestalla, y su idea es dar continuidad mañana contra el Sporting al mismo equipo que viene de empatar en el campo del Valencia (1-1) y de ganar, también a domicilio, en el del Rayo (1-3). El nuevo Dépor, al menos en las primeras jornadas, se presenta como una formación continuista y, sobre todo, muy reconocible. También para sus seguidores, que mañana acudirán al estadio con la esperanza de asistir al primer triunfo del conjunto blanquiazul como local en la presente temporada.
Como en los mejores años del Superdépor, cuando casi siempre jugaban de inicio los mismos once hombres, los aficionados tienen bastante claro a estas alturas cuál es el equipo base del Deportivo y cuál es su columna vertebral, que presenta tres nombres propios, uno por línea: Sidnei Rechel, el líder de la defensa; Pedro Mosquera, el canalizador del juego; y Lucas Pérez, el principal exponente ofensivo del equipo. Víctor esconde sus cartas, pero su idea es que mañana repitan los otros ocho futbolistas que también formaron desde el inicio ante Valencia y Rayo. Germán Lux sigue siendo muy fiable como relevo de Fabricio, a quien todavía le falta "un poquito" para estar disponible. Ayer volvió a ejercitarse con el grupo, aún sin el alta.
En los laterales son fijos Laure Sanabria y Fernando Navarro, ambos de marcado carácter defensivo. Le dan solidez a la retaguardia, lo mismo que Alejandro Arribas, afianzado como acompañante de Sidnei en el centro de la zaga después de que Víctor eligiera a Alberto Lopo para la primera jornada ante la Real Sociedad (0-0). En ese estreno liguero también fue titular Cani, quien al igual que Fabricio está en la recta final de su recuperación. El aragonés todavía está pendiente de recibir el alta médica y lo más probable es que vuelva a quedarse fuera de la lista para recibir al Sporting. No preocupa demasiado porque Víctor tiene alternativas ofensivas. En las bandas del ataque repetirán Juanfran y Luis Alberto, con Fayçal con mucha libertad para dejarse caer también a los costados. El marroquí está teniendo mucha presencia en los dos campos, tanto para echar una mano atrás como para llegar al área contraria. Suele asociarse con frecuencia con los dos mediocentros, Mosquera y Borges, que también están en un momento dulce en este comienzo de curso. Lucas, de nuevo en punta, completará la alineación con la que Víctor espera dar un nuevo estirón clasificatorio para afianzar al Dépor en la zona tranquila de la tabla.
En caso de vencer al Sporting el equipo coruñés se situaría con 8 puntos en cuatro jornadas, un balance sobresaliente para cualquier aspirante a la permanencia. La pasada campaña el Deportivo necesitó más del doble de partidos, en concreto nueve, para alcanzar esa cifra en su puntuación. El conjunto entonces dirigido por Víctor Fernández solo fue capaz de arañar cuatro puntos en los siete primeros encuentros, un fatal comienzo que puso al técnico aragonés por primera vez contra las cuerdas. Luego llegó la victoria ante el Valencia y a continuación el empate en el campo del Espanyol, dos resultados positivos que prolongaron la estancia del maño en Riazor. Un año después, el arranque del Deportivo es bastante mejor. Todavía no conoce la derrota pese a haber disputado dos de sus tres compromisos lejos de su estadio. Es un equipo en forma y con confianza, lo que deberá demostrar mañana ante el Sporting para enlazar dos triunfos consecutivos con los que poner definitivamente la velocidad de crucero en su singladura hacia la salvación.
