Donato puede presumir de ostentar dos marcas en el fútbol español: la de ser el futbolista nacido fuera de España con más partidos en Primera División (466) y también la de ser el jugador más veterano en marcar un gol en la máxima categoría. Esta marca la estableció frente al Athletic -el equipo que visitará Riazor este domingo-, en enero de 2003 con 40 años y 20 días, aunque la amplió cuatro meses después.
El exfutbolista del Deportivo anotó solo dos goles en ese curso -2002-03-, que fue el de su despedida del fútbol profesional. El primero fue el 19 de enero con motivo de la visita del Athletic a Riazor en la jornada 18. Héctor había marcado en propia meta un tanto que adelantó a los vizcaínos recién iniciada la segunda parte. Dos minutos después el hispano-brasileño estableció las tablas.
En ese momento Donato -nacido el 30 de diciembre de 1962- contaba con 40 años y 20 días. Acababa de entrar en la historia del fútbol español al superar el registro anterior, en poder de César Rodríguez, que había marcado con el Elche en la temporada 1959-60 con 39 años y 277 días.
Aquel gol de Donato equilibró el partido. Posteriormente Karanka anotó el segundo del Deportivo con un autogol y el partido acabó con victoria deportivista (2-1).
Antes de cerrar su trayectoria profesional, Donato firmó todavía otro gol. Fue otra vez en Riazor, ahora frente al Valencia en la jornada 34, disputada el 17 de mayo de 2003. De nuevo, como ante el Athletic, este gol sirvió para que el Deportivo empatase, ya que los de Mestalla dominaban en el marcador (0-1), gracias al acierto de Fabio Aurelio. El lateral brasileño valencianista repitió y rubricó el triunfo ché en el feudo blanquiazul.
Con el gol de ese Días das letras Galegas Donato mejoró el registro alcanzado frente al Athletic y estableció una marca de 40 años y 138 días que todavía no ha sido superada por ningún otro jugador en la máxima categoría de la Liga.
El exfutbolista blanquiazul y asentado en A Coruña no solo guarda un grato recuerdo de aquel tanto de 2003 ante los vizcaínos, también retiene en su memoria otro que le había metido a los vascos en la temporada 1998-99.
Era el minuto 84 y el exblanquiazul tenía el balón en el círculo central, en campo propio; tan pronto cruzó la linea del centro del campo soltó un latigazo que superó a un sorprendido Imanol Etxeberría -portero del Athletic-, cuyo esfuerzo no pudo evitar que la pelota le pasase por encima y se colase en su portería. Con ese tanto el Deportivo igualaba el partido y sumaba un punto vital para obtener la clasificación para la Copa de la UEFA. Era el primer año de Irureta como entrenador. Era el año anterior al de la consecución de la Liga por parte del Deportivo, con Donato también como protagonista al marcar el primer gol en el partido decisivo.
