Cuatro presuntos ultras del Deportivo se sentarán el próximo 18 de noviembre en el banquillo de los acusados del Juzgado de lo Penal número 2 de A Coruña para responder por un delito de daños por, supuestamente, destrozar un local de hostelería de Matogrande. La Fiscalía sostiene en su escrito de calificación sobre los hechos que los sospechosos formaban parte de "un grupo más amplio" que se congregó sobre las dos de la madrugada del 10 de mayo de 2011 frente a un hotel de Matogrande con la finalidad de "importunar con ruido, petardos y gritos" a los jugadores del Athletic de Bilbao que ese día por la tarde se enfrentaban al Deportivo.

Tras el altercado, los imputados y el resto de aficionados, siempre según el relato del Ministerio fiscal, se dirigieron a un establecimiento situado en la calle Enrique Mariñas Romero, en las inmediaciones del hotel, al que accedieron tocando un bombo y con sus rostros semiocultos por la ropa que vestían. "El propietario les comunicó que no les serviría consumición alguna, lo que desencadenó una violenta reacción por parte de todos", asegura la acusación en su informe, en el que relata que uno de los cuatro procesados le propinó un golpe en el pecho al dueño del local.

"Los integrantes del grupo comenzaron, conjuntamente, a arrojar sillas y todo tipo de objetos que tenían a su alcance contra la barra y el botellero que se ubicaba detrás", afirma la Fiscalía. Los desperfectos que el grupo ocasionó en el negocio fueron tasados en 7.036 euros. La compañía aseguradora indemnizó al propietario con 6.307 euros, por lo que renunció a personarse en el procedimiento judicial para reclamar ser indemnizado por los procesados.

El fiscal reclama que cada uno de los acusados sea condenado a pagar una multa de 6.000 euros por cometer un delito de daños. A la hora de solicitar la pena tuvo en cuenta la atenuante de dilaciones indebidas. Además, exige que como responsables civiles indemnicen a la aseguradora con 6.307 euros.