El colegiado andaluz anuló, a instancias de su asistente, un gol a Lucas en la segunda parte que habría significado el 2-0. Se equivocó, puesto que no existía fuera de juego. Melero López tuvo varios errores y casi siempre se equivocó en contra del Dépor, lo que acabó desesperando a la afición blanquiazul. El público silbó su actuación y la de su equipo de auxiliares, y se escucharon gritos de "¡Fuera, fuera!".