Lucas Pérez no pudo ejercitarse ayer por segunda jornada consecutiva junto al resto de sus compañeros. Las molestias que arrastra en el sóleo de la pierna izquierda volvieron a impedirle trabajar con normalidad y se quedó una vez más en el gimnasio en compañía de uno de los fisioterapeutas de la primera plantilla. La presencia del delantero en la convocatoria para enfrentarse al Espanyol mañana (18.15 horas) dependerá de lo que ocurra en el entrenamiento de hoy.

A pesar de que el propio jugador señaló el martes tras abandonar el entrenamiento que se trataba de molestias sin importancia, es la primera vez esta temporada que el entrenador deportivista, Víctor Sánchez del Amo, enfila un partido con la duda de Lucas.

El pichichi deportivista solo se ha sido suplente en una ocasión esta temporada. Fue ante el Betis en la primera vuelta, en la quinta jornada del campeonato, cuando el equipo aún no había desarrollado esa dependencia hacia sus goles y todavía no se había erigido en la principal referencia ofensiva. Desde entonces lo ha jugado todo, convirtiéndose en el futbolista más destacado del conjunto blanquiazul. Su posible ausencia abre así una serie de incógnitas sobre cómo podría resolverlo Víctor.

Sus goles, fundamentales. Lucas suma catorce goles que lo convierten en el pichichi del equipo y en el segundo máximo anotador nacional tras Borja Bastón. El equipo ha conseguido mitigar durante las últimas jornadas la dependencia que sufría del coruñés. Los tantos de Luis Alberto y Fayçal en las últimas jornadas han aliviado la responsabilidad de Lucas, que sin embargo no encuentra relevo por parte de los otros delanteros.

Los recambios, secos. Las impresionantes cifras goleadoras del coruñés contrastan con las de los otros delanteros del equipo. Superada ya la primera vuelta del campeonato, ni Jonathan Rodríguez ni Oriol Riera han conseguido marcar todavía en Liga. El catalán anotó en Copa, pero ni él ni el uruguayo han conseguido espantar un gafe que les persigue desde hace meses. Uno de los dos debería sustituir a Lucas en el once inicial en el caso de que el coruñés decida no arriesgar, pero surgen dudas acerca de si lograrían adaptarse al juego que practica el equipo.

La velocidad, clave. A medida que ha ido transcurriendo el campeonato, el Deportivo ha ido adaptando su juego cada vez más a las condiciones de Lucas Pérez. La velocidad del coruñés, su capacidad de desmarque y su presión adelantada se han vuelto signos de identidad de este Deportivo. Quien mejor se podría adaptar a estas condiciones sería Jonathan Rodríguez, ausente de las últimas convocatorias. Luis Alberto, sin embargo, se quedaría huérfano del socio con el que mejor se ha entendido esta temporada.