Jonathan Rodríguez vuelve a quedarse fuera de los planes de Víctor Sánchez por segunda jornada consecutiva. El uruguayo es el único descarte por decisión técnica para el partido de mañana contra el Málaga, un rival que, según el entrenador madrileño, obligará al Dépor a "tener mucha paciencia y no caer en precipitaciones". Del adversario destacó, por encima de todo, su firmeza defensiva. "Es muy sólido, muy organizado, y concede pocas ocasiones", matizó. "Estamos en uno de los momentos más difíciles de los que hemos vivido. Enfocamos las dificultades como un reto y estamos convencidos cada semana de que el próximo partido va a ser el que sirva para recuperar la senda de los buenos resultados", señaló Víctor, quien apeló también al apoyo del público de Riazor: "La afición va a estar seguro con el equipo y jugadores se lo merecen porque siempre dan la cara y los aficionados lo saben".

Víctor dirigió esta mañana en Abegondo el penúltimo entrenamiento antes del partido contra el Málaga. Mañana a las 10.30 horas los convocados acudirán a Riazor para completar un último ensayo, que será a puerta cerrada. Será entonces cuando el técnico aprovechará para probar con los once futbolistas que planea alinear frente al conjunto andaluz. Los lesionados Sidnei, Cani y Juan Domínguez avanzaron en sus respectivas recuperaciones al margen del grupo, los tres sobre el césped de la ciudad deportiva. Son las únicas bajas de Víctor, que recupera a Germán Lux tras el partido de sanción que el argentino cumplió el miércoles en San Mamés.

El Dépor intentará mañana romper de una vez por todas la mala racha de resultados tras once jornadas consecutivas sin vencer. Todavía no ha ganado en 2016 y su último triunfo fue el 19 de diciembre del año pasado, 2-0 en Riazor contra el Eibar.

Tras el entrenamiento, Lucas Pérez pidió "tranquilidad" pese al prolongado bache y aseguró que la cita de mañana "no es una final". "Final fue la del año pasado en el Camp Nou", recordó sobre la última jornada del curso anterior. "Ni antes éramos tan buenos, ni ahora tan malos. Nos vamos a salvar con más tranquilidad que el año pasado", aseguró el coruñés, pichichi del equipo con 14 goles. No cree que el equipo sufra un bajón, sino "una mala racha que hay que pasarla". "Confiamos en nuestro trabajo. No pienso que haya un bajón. Lo que pasa es que antes entraban, y ahora no", dijo en referencia a la falta de eficacia en los últimos dos meses.