El Deportivo encajó tres goles ayer en Riazor y los tres en acciones a balón parado. Eso fue lo primero que se le preguntó a Víctor Sánchez del Amo cuando apareció en la sala de prensa. "Las hemos encajado y eso no nos deja contentos", resumió.

Sin embargo, el técnico volvió a insistir en que su grupo se va de vacío después de haber hecho méritos suficientes para sumar los tres puntos, algo que no hace desde hace dos meses. "Vuelve a ser un partido en el que esos detalles nos privan de llevarnos la victoria después de haber hecho todo en el campo para merecerla", explicó. Según el entrenador blanquiazul, sus jugadores pudieron haber acumulado más goles en el luminoso. "Tuvimos ocasiones clarísimas, hasta en la línea de gol", dijo refiriéndose al disparo de Lucas, que dejó a un lado a Kameni y estrelló el balón contra un defensa cuando podía marcar a placer.

A pesar de este tipo de jugadas, el Deportivo supo dar un paso adelante para continuar en la lucha por los tres puntos. Eso satisface a Víctor. "El equipo supo sobreponerse de palos muy grandes", comentó. Y es que se vio dos veces por debajo en el marcador. "Tiene capacidad de reacción, sigue jugando y generando situaciones para dar la vuelta", agregó el técnico.

Los últimos minutos, para olvidar. Todo el trabajo se tiró por la borda con otra acción a balón parado. Aunque esta vez quien la introdujo en la red de Lux fue su compañero Arribas, que intentaba despejar. "Y después, al final, de las pocas situaciones que han tenido para llegar cerca hacen un gol".

Víctor no achacó todo a la mala suerte, también reconoció el nivel del rival. "Los rematadores han ejecutado muy bien" y eso que sus pupilos estaban más que avisados de su poderío en el juego aéreo: "Hemos visto imágenes durante el previo en bucle en el vestuario. Sabíamos que es un especialista en ese juego", señaló. En resumen, se escaparon dos puntos". "Como nos ha pasado en otras jornadas", añadió. Para que no vuelva a ocurrir, el Deportivo deberá "saber competir en los últimos minutos". Aunque no cree que su equipo se siente presionado por la clasificación. "Si los jugadores estuvieran atenazados, no habrían hecho este partido". Y los felicitó por su derroche sobre el terreno de juego: "Han competido muy bien. Esta es la línea que tenemos que seguir. Esta es nuestra realidad, la de luchar por la permanencia. Haciéndolo así estamos seguros de que lo vamos a lograr", declaró como mensaje de tranquilidad a la afición. "Hemos reaccionado y roto la racha de tres derrotas consecutivas".

También fue preguntado sobre si duele más este empate, ya que el partido contra el Málaga podría ser considerada una final, pero Víctor evitó tantos dramatismos y volvió a sacar el lado positivo. "El partido inminente siempre es el más importante porque es el que se juega. Hay rabia por haberlo tenido tan cerca y haber perdido los dos puntos pero los jugadores son valientes y han demostrado que en momento difíciles dan la cara". El técnico anima a "seguir trabajando" para mejorar y reencontrarse por fin con la victoria.