Víctor Sánchez está pendiente de la evolución de los centrales Alejandro Arribas y Alberto Lopo, que tuvieron que abandonar antes que el resto de sus compañeros el entrenamiento de ayer por culpa de problemas físicos, en principio menores. El primero en retirarse fue el catalán, con molestias en un tobillo. Poco después lo hizo el madrileño, con una contusión en el muslo producto de un choque fortuito con Jonathan. Según los servicios médicos del Deportivo, se trata de percances leves que les deberían permitir estar a disposición de Víctor para el sábado contra el Levante. Róber, central del Fabril, es baja tras lesionarse en el Vicente Calderón.

Otro de los zagueros blanquiazules, Sidnei Rechel, continúa con su plan de recuperación y ya toca balón. El brasileño tiene esperanzas de estar listo para el primer partido tras el parón de Liga, el derbi del 2 de abril contra el Celta.