A falta de tres días para el partido contra Las Palmas el Deportivo llega desarmado en defensa por las ausencias de Arribas y Luisinho por sanción, y la reciente alta médica que recibió Manuel Pablo. Víctor Sánchez llega a este encuentro con tres centrales -Sidnei, Lopo y Róber-, un lateral zurdo -Navarro- y tres laterales diestros -Juanfran, Laure y el propio Manuel Pablo-, aunque en el caso del madrileño y del canario también podrían ser alineados por la izquierda en caso de necesidad.

Menos mal que Sidnei está en perfectas condiciones porque su cambio en la jornada pasada en Balaídos levantó las alarmas sobre una posible recaída, aunque nada más finalizar el encuentro fue el mismo Víctor el que explicó la razón de sus sustitución: "Estaba prevista". Jugará el brasileño, pero su pareja habitual estará ausente durante los tres próximos partido por una sanción federativa gracias al trabajo de Fernández Borbalán. En teoría su sustituto sería Fernando Navarro, que ya había sido su compañero en el eje de la zaga durante los partidos en los que Sidnei estuvo lesionado, pero la baja de Luisinho -acumula cinco cartulinas amarillas- obliga al defensa catalán a jugar en su puesto habitual. Por lo menos a priori.

"Perdemos a un compañero importante que lleva haciendo un gran año y fastidia", comentó Lucas ayer en la rueda de prensa de Abegondo. Una baja sensible, pero que el equipo puede notar más en el partido del lunes porque coincide con la de Luisinho. Sobre todo porque Alberto Lopo está manteniendo una temporada un tanto irregular, quizá por la falta de continuidad que tienen tanto Arribas como Sidnei; también porque el otro posible central, Róber, todavía dispuso de menos minutos que el zaguero catalán. En cualquier caso, la experiencia le ha permitido a Lopo colaborar con sus compañeros cuando su presencia fue necesaria, sobre todo en los partidos de la recta final de la pasada temporada en los que, incluso, anotó, dos goles que resultaron decisivos, en San Mamés ante el Athletic y frente al Levante en Riazor.

A pesar de la diferencia de puntos con el descenso -en el peor de los casos el Deportivo acabaría la jornada a seis puntos si ganasen el Sporting, recibe al Celta, y el Getafe, que visita al Villarreal- los futbolistas insisten en que el objetivo todavía no está alcanzado. "En el vestuario no pensamos que estamos salvados", aseguró Luis Alberto en su web oficial. "Nuestra mentalidad es conseguir todos los puntos posibles y poder mirar para arriba en vez de para abajo de la clasificación", añadió el andaluz. En parte por los aficionados, pero también por el club, porque no se puede dejar de lado que el puesto al final de temporada también influyen en el reparto de los ingresos por televisión.