Modificaciones en el once de Víctor para este partido. Unas tácticas y otras, a modo de convocatoria, disciplinarias. Voy a hacer un inciso y dejar mi comentario acerca de esta situación. Los jugadores componen una plantilla y deben empujar todos para conseguir los objetivos marcados por el club, que es quien les paga y permite vivir por algo por lo que han peleado toda su adolescencia. Cuando alguien empieza a pensar en sí mismo dejando de empujar con el resto de compañeros, el entrenador es el primero que debe tomar decisiones y creo que es lo que ha hecho Víctor. Lo del Instagram de Lopo no hace más que ver que la decisión ha sido acertadísima. No sé si esta decisión ha influido en la actitud del resto de compañeros, pero su intensidad en la primera parte, salvo los cinco últimos minutos, ha dejado mucho que desear. Destacar una vez más que recibir otro gol a balón parado indica poca actitud defensiva y falta de la concentración necesaria que debe tener un equipo de Primera División. Hubo fases del partido en las que parecía que el equipo con problemas en la clasificación era el local. Y los primeros minutos de la segunda parte han sido un despropósito lleno de precipitaciones con alguna llegada más que en la primera parte y ahí el gol de Fede, que tapa un poco las carencias y defectos que ha mostrado el equipo coruñés. Seguramente este punto nos va a dar la salvación, pero hay que aprender de los errores que hemos tenido este año para poder disfrutar toda la temporada de un equipo competitivo.
