Macario Bravo, el psicólogo del Deportivo, participó en la larga charla que Víctor Sánchez, arropado por sus ayudantes, dedicó a la plantilla sobre el césped antes de que comenzara el entrenamiento de ayer en Abegondo. A esa puesta en común, que se prolongó durante casi media hora, asistió el lesionado Lux, pero no Luisinho. Según el club, mientras el grupo se reunía el lateral hacía tareas específicas en el gimnasio.